Jesús Alfredo Alfredillo Guzmán, hijo de Joaquín el Chapo Guzmán Loera fue noticia en septiembre de 2018 cuando la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) lo incluyó en su lista de los 10 narcotraficantes más buscados.
Se le acusa de pertenecer al Cártel de Sinaloa y de los delitos de conspiración por posesión e intento de distribuir sustancias controladas, así como por conspirar para importarlas y exportarlas.
Antes, en 2016, una fotografía suya con Kate del Castillo tomada durante la reunión que la actriz y Sean Penn tuvieron con su padre, dio la vuelta al mundo.
En Instagram existe una cuenta a nombre de Jesús Alfredo Guzmán Salazar, sin embargo, abogados de Guzmán Loera han negado en distintas ocasiones de algún integrante de la familia tenga redes sociales.
En 2012 las autoridades mexicanas detuvieron a un joven que creían que era Alfredillo, pero se comprobó que se trataba de alguien que no tenía nada que ver con la familia del Chapo Guzmán.
El detenido fue identificado como Félix Beltrán y al momento de su captura tenía USD 135.000 en efectivo, dos rifles, cuatro granadas, dos armas cortas e identificaciones falsas.
Horas después sucedió algo insólito, la entonces Procuraduría General de la República (PGR), antes de comprobar el parentesco con el narcotraficante, lo presentó ante la prensa como Alfredo Guzmán Salazar.
Posteriormente, una mujer llamada Verónica González, se presentó como abogada ante los medios de comunicación para aclarar que el detenido no se llamaba Jesús Alfredo Guzmán, sino Félix Beltrán León, además de que no tenía ningún parentesco con el narcotraficante y se dedicaba a la venta de autos usados en Jalisco.
A pesar de no ser hijo del Chapo, Beltrán León fue consignado ante un juez federal y enviado a la cárcel de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México.
El juez de la causa determinó iniciarle proceso penal por los delitos de portación y acopio de armas, así como por el ilícito de lavado de dinero.
Después de su consignación, no se supo más del caso ni de sus abogados. Jesús Alfredo Guzmán sigue sin ser detenido o retenido por las autoridades como ya pasó con sus hermanos Iván Archivaldo y Ovidio.
Alfredillo y el Cártel de Sinaloa
De acuerdo con su perfil público con el que cuenta la DEA, Alfredo habría nacido en 1983, tiene piel blanca, pero se desconoce su estatura y peso.
Los documentos del caso 1:09-cr-00383 en contra de Jesús Vicente Zambada Niebla el Vicentillo, en Estados Unidos, a los que Infobae México tuvo acceso, revelan que Alfredillo actuó como coordinador logístico que tuvo a su cargo entregas de cantidades de cocaína y heroína de varios kilogramos a Estados Unidos en nombre del Chapo y la facción Guzmán-Loera del Cártel de Sinaloa, así como entregas de cantidades a granel de dinero a su padre.
En una serie de conversaciones grabadas al hijo del Chapo, acuerda con los hermanos Pedro y Margarito Flores, antiguos distribuidores en EEUU, la entrega de 18 kilogramos de heroína. La droga fue entregada y confiscada, pero, posteriormente entregó dos kilos más.
El 14 de noviembre de 2008, Pedro Flores grabó una llamada con Guzmán-Salazar durante la cual Flores le pidió que le proporcionara un número para que Flores pudiera contactar directamente al Chapo.
Después de las llamadas de Guzmán-Loera, Pedro Flores grabó otra conversación con Alfredo. Flores declaró que “los de ayer salieron muy bien [la heroína era de buena calidad].” Guzmán-Salazar preguntó: “¿Cuáles estás diciendo?” Flores respondió: “El veinte [20 kilos de heroína] “. Pedro continuó diciendo: “Le estaba diciendo a tu viejo [Guzman-Loera] ahora mismo eso… para ver si habría una posibilidad de enviar otros cinco [cinco kilos adicionales de heroína]. No sé si los tienes. Porque voy a depositar el cheque para aquellos mañana [pagar los 20 kilos de heroína]… Ve si tienes otros cinco y avísame.”
A pesar de las pruebas que Estados Unidos tiene en su contra, no se ha logrado su captura, reseña INFOBAE