El Congreso de Estados Unidos (EEUU) admitió que las sanciones impuestas contra Venezuela no han ayudado a derrocar al presidente de la República, Nicolás Maduro; por el contrario, contribuyeron a la crisis económica y migratoria en el país suramericano.
Así quedó registrado en un informe especial publicado este miércoles por el Servicio de Investigación del Congreso gringo, con fecha del 16 de enero.
En dicho texto explican que desde 2005 Estados Unidos ha impuesto sanciones a personas y entidades venezolanas. Especialmente, en agosto de 2017, el Gobierno de Donald Trump aplicó sanciones financieras adicionales más duras, como la prohibición “al acceso a EEUU de mercados financieros por parte del Gobierno Bolivariano, incluida la empresa estatal de energía Petróleos de Venezuela, S.A. (Pdvsa)”.
“Esas sanciones fallaron en desalojar a Maduro del poder y contribuyeron a una crisis económica en el país que ha llevado a 7,7 millones de venezolanos a huir», refiere el documento.
No es la primera vez que una institución gringa menciona el impacto negativo de las medidas unilaterales de EEUU contra Venezuela. Anteriormente, en febrero de 2021, la Oficina de Rendición de Cuentas del Gobierno de Estados Unidos (GAO, por sus siglas en inglés) develó que las sanciones durante la administración Trump contribuyeron a una caída pronunciada de la economía venezolana.
La Oficina de Servicios de Investigación del Congreso de EEUU publica nuevo informe sobre sanciones contra Venezuela. Afirma que «fallaron en desalojar a Maduro del poder y contribuyeron a una crisis económica en el país que ha llevado a 7,7 millones de venezolanos a huir.» pic.twitter.com/3toIBz6itI
— Francisco Rodríguez (@frrodriguezc) January 24, 2024