Los colombianos acudirán mañana a las urnas para elegir a 1.101 alcaldes y 32 gobernadores, además de concejales y diputados regionales, una disputa que puede dar el primer indicio de cómo están las fuerzas políticas del país de cara a las próximas presidenciales.
La atención se centra en la Alcaldía de Bogotá, el segundo cargo en importancia del país, donde cuatro candidatos de todo el espectro político aspiran al cargo para el periodo 2020-2023.
Las últimas encuestas pronostican una victoria del exsenador independiente Carlos Fernando Galán en una apretada disputa con la también exsenadora Claudia López, del partido Alianza Verde; en tercer lugar figura Miguel Uribe Turbay, de la coalición de derechas Avancemos, y cierra Hollman Morris, de la coalición de izquierdas de Colombia Humana, Unión Patriótica y Mais.
Detrás de dos de esas candidaturas están pesos pesados de la política nacional que fueron candidatos en las pasadas elecciones presidenciales y son potenciales aspirantes a las de 2022.
Uno es Sergio Fajardo, que respalda a Claudia López, quien hasta hace unas semanas lideraba con holgura las encuestas, y el otro es el senador Gustavo Petro, jefe de la oposición al presidente Iván Duque, que rechazó la posibilidad de un acuerdo con la candidata verde y mantuvo hasta el final la de Morris, su delfín.
«Es un orgullo para mi acompañar a Claudia López», asegura Fajardo sobre la exsenadora verde, que fue su compañera de fórmula en las presidenciales de 2018, en la que acabó tercero, y este sábado expresó en Twitter su confianza de que ella será la primera alcaldesa de Bogotá elegida en las urnas.
Una encuesta divulgada el jueves daba sin embargo a López el 31,2 % de la intención de voto, cuatro puntos menos que el 35,2 % de Galán, pero dado al margen de error del sondeo, nadie puede cantar victoria de manera anticipada.
El nombre de Fajardo ya empieza a sonar como posible candidato presidencial en 2022 y un triunfo de su principal aliada en Bogotá, el mayor colegio electoral del país, le daría un buen caudal de votos para comenzar.
Petro, por su parte, está omnipresente en la propaganda de campaña de Morris y en las redes sociales pide «a todo el electorado de Colombia Humana (su movimiento político) que piensa votar por Claudia o Galán, votar por Hollman y ganar la Alcaldía» que él mismo ocupó en el periodo 2012-2015.
«La Colombia Humana empieza a construirse el 1 de enero del año 2020 (día en que asumirán los nuevos alcaldes). Ganemos este 27 de octubre y la Colombia Humana es ya», asegura Petro en un vídeo de la campaña de Morris que indica que alcanzar la Alcaldía de Bogotá será el punto de partida para su próxima campaña presidencial.
Según analistas, la negativa de Petro a apoyar a López, que a su vez lo respaldó públicamente en la segunda vuelta presidencial de 2018, en la que fue derrotado por Duque, es una estrategia política de largo plazo ya que un triunfo de la exsenadora verde la pondría en condiciones de disputarle el liderazgo entre la izquierda.
Pensando en un proyecto nacional, la Colombia Humana de Petro postuló a Nicolás Petro, hijo del senador, como candidato a la Gobernación del Atlántico, feudo electoral de la poderosa familia Char, que desde 2008 gobierna Barranquilla, la capital de ese departamento.
«A votar por Nicolás Petro y la Colombia Humana en el Atlántico. No mas mafias políticas y corrupción en el Caribe», promueve Petro en las redes sociales, pero las encuestas son contundentes: la candidata de los Char, la exalcaldesa Elsa Noguera, tiene el 70,5 % de la intención de voto, contra el 18,4 % del hijo del senador.
El porcentaje de Nicolás Petro no es despreciable si se tiene en cuenta que es la primera vez que aspira a un cargo de elección popular y sus votos pueden servir de base en los departamentos del Caribe colombiano para una próxima candidatura presidencial de Gustavo Petro.
Por su parte el uribismo, que en 2018 volvió al poder con Duque, tendrá también su prueba de fuego en Bogotá, donde está por verse cuántos votos es capaz de ponerle a la candidatura de Miguel Uribe, tercero en las encuestas.
Lo mismo en Medellín, su bastión, donde salvo una sorpresa mayúscula, debe ganar su candidato, Alfredo Ramos Maya, que tiene el 35,6 % de las intenciones de voto y aventaja por casi diez puntos al segundo.
La palabra la tienen mañana en las urnas los 36,6 millones de colombianos llamados a las urnas para unas elecciones que, a diferencia de las tres últimas, están marcadas por un nuevo brote de violencia política que costó la vida a tres candidatos a alcaldías y a cuatro al concejo.
Para garantizar la seguridad de candidatos y votantes, el Ministerio de Defensa anunció este sábado que más de 165.949 policías y militares estarán desplegados este domingo en todo el país y contarán con el apoyo de 48 aeronaves entre helicópteros y aviones de vigilancia del Ejército.