“El señor Casado me ha dicho esta mañana que la entrevista con EL PAÍS ha sido un ataque a su autoridad. Mi concepción de la libertad es incompatible con la suya de autoridad”, ha asegurado Cayetana Álvarez de Toledo tras su destitución como portavoz parlamentaria del PP, a las puertas del Congreso de los Diputados. Pablo Casado ha decidido sustituirla este lunes por Cuca Gamarra, actual vicesecretaria de Política Social. La decisión llega tras meses de desencuentros con los barones del ala moderada y el secretario general de los populares, Teodoro García Egea.
Álvarez de Toledo ha hecho referencia a otros desencuentros que ha mantenido a lo largo de estos meses con el líder de los populares, como la destitución como jefe de la asesoría jurídica del grupo en el Congreso a Gabriel Elorriaga, persona de la máxima confianza de la portavoz parlamentaria. “Fue una invasión de competencias, algo que se ha producido desde el minuto uno. Casado trató de restringir al mínimo la autonomía de la dirección del grupo desde el principio”, ha afirmado la ya exportavoz.
La diputada ha lanzado varios mensajes al líder del PP y ha criticado la etiqueta de “dura” que asegura que se le ha achacado desde el principio. “Los partidos deben ser organizaciones de personas que trabajan desde su criterio propio. Casado necesita a su lado personas leales, pero con criterio propio. La idiosincrasia personal es compatible con la unidad”, ha defendido.