La alcaldesa de Bogotá dijo estas palabras en el marco de las cifras de seguridad que rodean a la capital. Aseguró que cualquier extranjero que quiera venir “a ganarse la vida decentemente”, será bienvenido, pero que aquel que venga a delinquir “debe ser deportado sin contemplación”.
Un acto de violencia generó indignación este jueves en la capital. En horas de la mañana, Oswaldo Muñoz Palacios perdió la vida en un articulado de Transmilenio, luego de que un par de delincuentes lo apuñalaran en medio de un intento de robo. Aunque por el momento se desconoce la identidad de estas personas, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, se refirió a la inseguridad de la ciudad y al papel que estarían jugando algunos venezolanos en esta materia.
“Sé que un dolor de cabeza para todos es el tema de seguridad, lo reconocimos. Tanto en Kennedy como en Bogotá tenemos un problema serio, y hoy en particular tenemos un dolor muy grande por lo que pasó – haciendo referencia al caso de Muñoz-”, dijo la mandataria.
López explicó que son 14 los indicadores que se miden en Bogotá para determinar sus condiciones de seguridad, de estos, en lo corrido del año se ha logrado una mejoría en doce, en parte por la implementación de las cuarentenas estrictas. De los dos restantes uno llama especialmente la atención y es homicidios, el cual creció 1 % en la ciudad.
“No quiero estigmatizar a los venezolanos, pero hay unos inmigrantes metidos en criminalidad que nos están haciendo la vida cuadritos. Tenemos que volver a traer a Migración Colombia. Aquí el que quiera venir a ganarse la vida decentemente bienvenido pero el que venga a delinquir debemos deportar sin contemplación”, concluyó.
"No quiero estigmatizar a los venezolanos, pero hay unos que en serio nos están haciendo la vida de cuadritos. Aquí el que venga a trabajar bienvenido sea, pero el que venga a delinquir deberíamos deportarlos inmediatamente: alcaldesa @ClaudiaLopez#TuGobiernoEnKennedy pic.twitter.com/3s1K4Dn1XA
— Alcaldía de Bogotá (@Bogota) October 30, 2020
Como lo dice la mandataria, con sus palabras no busca alimentar la xenofobia contra esta población, pero sí reconocer que parte de estos migrantes han contribuido al deterioro de la seguridad en la capital.