La organización conocida como Gran Alianza Nacional de Venezuela (GANA) solicitó a las autoridades estadounidenses que investigan el masivo caso de corrupción contra el empresario Raúl Gorrín que revelen los nombres de las personas que estuvieron recibiendo dinero del dueño de Globovisión, quien se supone que extrajo más de $1,000 millones del Estado venezolano.
La solicitud de develar los nombres es presentada bajo la sospecha de que algunos integrantes de la oposición venezolana se encuentran “sobornados” por Gorrín y otros empresarios vinculados al régimen.
En la carta dirigida a los fiscales federales que llevan el caso de corrupción en Miami, la organización opositora precisa que tienen sospechas con buena base de que personas que dicen formar parte de la oposición venezolana se encontraban en la nómina del controversial empresario:
“Hacemos esta solicitud porque tenemos la certeza que entre los beneficiariosse encuentran no solo funcionarios del régimen de Nicolás Maduro, sino también un grupo relevante de dirigentes opositores”, manifestó Enrique Aristeguieta Gramcko, presidente de GANA, en la misiva.
Por otra parte, y en una carta dirigida al Secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, la Organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio también pidió al gobierno estadounidense que los fondos a ser obtenidos sean empleados para ayudar a los millones de venezolanos que están siendo golpeados por el colapso económico del país.
“El dinero de los corruptos y ‘boliburgueses’ del régimen es un dinero que le robaron al pueblo venezolano (..) Ante esta situación queríamos proponer muy respetuosamente se estudie la posibilidad de colocar el dinero proveniente de este remate y de cualquier otra incautación que se le haga a funcionarios o empresarios corruptos venezolanos en Estados Unidos en un fideicomiso en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) con la finalidad de ser utilizado en la reconstrucción de Venezuela, un vez se salga del régimen de Nicolás Maduro y exista un gobierno reconocido por los venezolanos y la comunidad internacional”, se lee en la misiva a la que tuvo acceso El Nuevo Herald.