El certamen se consolida en medio de la controversia. Será animado por Carmen Victoria Pérez y Josué Villaé. Buscará emular los desfiles de Victoria’s Secret
Al primer casting de Nuestra Belleza Venezuela asistieron solo 15 jóvenes. Las aspirantes a estrenar la corona del naciente concurso necesitaban tener un toque de gracia, sin mayores requisitos de estatura ni de peso.
Sin embargo, las curiosas pasaban de largo frente al lugar en el que hacían la audición.
Ante el poco poder de convocatoria, Carlos Escobar, creador del proyecto, decidió recorrer el país para reclutar a 25 mujeres que quisieran competir por un carro 0 kilómetros y 200.000 bolívares. El publicista logró su cometido, además de generar controversia en el camino.
Profesionales vinculados al Miss Venezuela fueron invitados a ser parte del proyecto, lo que no fue bien visto por los organizadores del concurso de belleza más importante del país. «No queremos competir con nadie, menos con una institución como el Miss Venezuela. Nos sentimos como David frente a Goliat», dice Escobar, quien tuvo que cancelar los contratos de Mariela Celis, Eric Marchán y Erick «el Pollo» Simonato (a quienes ya les había cancelado 50% de lo acordado) después de que Venevisión no autorizó su participación en el nuevo certamen.
Otro caso es el del fotógrafo Iván Dumont, que fue despedido de la organización después de que comenzó a trabajar con Nuestra Belleza Venezuela.
«No entiendo por qué ha habido tanto revuelo. Me imagino que es porque los medios han centrado la atención en nosotros», expresa Escobar.
Gabriel Ramos, productor del evento, ahora recibe varias llamadas al día de jóvenes interesadas en participar y patrocinantes que quieren formar parte del proyecto. Después de haber estado vinculado 18 años con el Miss Venezuela, mantiene buena relación con los gerentes de la organización. «Osmel es mi papá. Cualquier cosa me la diría a mí porque somos amigos. Tal vez todo este revuelo se debe a que la gente está ávida de algo nuevo».
La principal diferencia entre ambos certámenes está en el concepto. «Nuestra Belleza Venezuela tiene la dinámica de un desfile de Victoria’s Secret combinado con un concurso de belleza. El rigor de este tipo de eventos exige que haya un desfile en traje de baño (diseñados por Ignacio Delgado) y otro en traje de gala (confeccionados por Alejandro Fajardo)», indica Ramos.
El productor no quiere adelantar muchos detalles de la gala que se llevará a cabo el 27 de agosto en el salón Plaza Real del hotel Eurobuilding. Por los momentos dio a conocer que el opening estará a cargo del grupo musical Caibo.
Otro de los datos que se guarda con celo es el nombre del diseñador que vestirá a Carmen Victoria Pérez, quien junto con Josué Villaé animará el certamen. «Me costó convencerla, porque Carmen es una institución, no se mueve por dinero. La involucré tanto que ahora hablamos cinco veces al día.
Es una mujer llena de historia, de aprendizaje. 7 horas con ella se vuelven 10 minutos. Ha tenido ofertas similares en 26 años y aceptó porque sabe que hago las cosas con gusto y quiere impulsar lo nuevo. Es un honor», afirma.
La ganadora del concurso será elegida por el jurado integrado por Jacqueline Aguilera, Mila Toledo, Iván Dumont, Carol Ginter, Martín González, Leo Salazar y Eduado Cano.
La ronda de preguntas no está concebida en este certamen.
«La idea no es someterlas al escarnio publico. Hay que ponerse en el lugar de una muchacha que se para frente a un escenario con 800 personas. Hasta a mí se me pone la mente en blanco», dice Ramos.
Nuestra Belleza Venezuela cuenta con la dirección artística Miguel Alemán. María José Vilaseco es la profesora de pasarela, George Wittels es el responsable del diseño de la corona y Ninoska Bello confeccionó las bandas con los nombres de las regiones que representarán las candidatas.
Iván Zambrano/El Nacional