En la cúspide de su carrera, un trágico episodio casi acaba con su vida. Ella se recuperó y consolidó su vida familiar y profesional
por Carmela Longo/Impacto Venezuela
Una tarde de 1995 el ultraliviano en el que iba Ana Karina Manco junto a su novio fue descontrolado por el viento y se desplomó. Ella terminó con fracturas en casi todo su cuerpo, heridas abiertas, sangre. Él no. Ella sobrevivió, él no.
Ese día, la historia de la actriz venezolana se dividió en dos. Manco, quien no llegaba a los 30 años, se encontraba, sin ninguna duda, en su mejor momento. Era el rostro de una exitosa marca de jeans, hacía vallas, videoclips y era una de las protagonistas de la telenovela que tenía, nada menos, que la misión de sustituir a la longeva y exitosa Por estas calles.
Amores de fin de siglo reunió un elenco de las primeras figuras del ámbito dramático de mediados de los noventa. Desde Ruddy Rodríguez hasta Daniel Lugo, pasando por Maricarmen Regueiro, Flavio Caballero, Carlos Márquez, Tomás Henríquez y un largo etcétera.
Pero ese accidente marcó su vida. No solo porque estuvo casi un mes en Terapia Intensiva, muchos de sus días en coma, sino también porque a 25 años de distancia esa segunda vida que cobró Ana Karina se convirtió, nuevamente, en lo exitosa que fue la primera.
De leyes, poco
Nacida en Caracas, Ana Karina Manco estuvo influenciada por su padre, un exitoso locutor radial. A los 13 años en La mujer sin rostro, una telenovela del canal estatal Venezolana de Televisión. Luego pasó a Radio Caracas Televisión donde junto a Caridad Canelón trabajó en Señora.
En ese canal hizo la primera parte de su carrera actoral en otras producciones como Por estas calles, Rubí rebelde y La Pasión de Teresa, entre otras.
Sin embargo, alternó ese trabajo con sus estudios de Derecho pero nunca lo ejerció. Su pasión era por las cámaras, el medio audiovisual. Por eso, se certificó como locutora en la www.ucv.ve/, porque lo que buscaba era hacer carrera en los medios.
Fue así cuando un año después de haber sufrido el accidente que casi la deja sin vida que retornó con fuerza. Pero ya en Venevisión. En Sol de tentación hizo su reaparición en una historia que fue recibida con los brazos abiertos.
Desde entonces más de diez títulos llevaron su nombre en los créditos principales. Manco siempre ha sido una mujer rating, musa del escritor Leonardo Padrón y decidida a brillar. No se amilanó por ese triste episodio de su vida.
De hecho, actualmente, aprovechando la pandemia y la nula producción de telenovelas en Venezuela desde hace varios años, está al aire en dos producciones consecutivas. Venevisión retransmite a las 9 pm La mujer perfecta y a las 10 pm Aunque mal paguen, de la cuales ella fue la protagonista.
Ana Karina Manco De la TV a la moda
En plenas grabaciones de la última de las telenovelas mencionadas la actriz se dio cuenta de que estaba embarazada. El autor Alberto Barrera tuvo que modificar la historia para justificar su salida de la historia de Catalina, la protagonista.
Al poco tiempo nació su primogénito Dimitri, con su esposo Vicente Pérez Recao, un empresario con quien se casó en 2002. En marzo, Ana Karina Manco había anunciado que abriría una galería de arte, la cual inauguraría luego del matrimonio. El proyecto nunca se dio.
Sin embargo, Manco sorteó el episodio, con un matrimonio que ya suma 12 años y dos niños. Alexa, su hija menor, nació hace seis años. Recientemente, la actriz informó que todos se habían contagiado con coronavirus, del que ya salieron.
En su carrera también hizo una película, The Island of Two Rainbow y mientras vivió en Venezuela se dedicó a la radio.
En su tiempo de residencia en Miami, Manco ha hecho teatro, participado en series como Escándalos y a emprender. Una línea de leggins es su otro “hijo”.