Las utilidades cada vez alcanzan menos: quedaron para pagar deudas

bolívares

La caída del poder adquisitivo de los trabajadores que perciben salario mínimo será de 50% a final de año, afirma el economista  Luis Oliveros

Dulce María Rodríguez/El Nacional

A un mes de la llegada de diciembre, los trabajadores no están entusiasmados ni han planificando lo que harán con las utilidades. Por el contrario, con nostalgia, aseguran que en años anteriores arreglaban la casa, compraban regalos, preparaban hallacas y pernil para las cenas de  Navidad y Año Nuevo, ahorraban, salían de viaje y compartían vino o pan de jamón en fiestas con amigos. Sin embargo, este año apenas les alcanzará para abonar a la tarjeta de crédito, comprar juguetes y colaborar para celebrar en familia la llegada de 2017.

Josefina Gil, comunicadora social con 35 años de ejercicio profesional, calcula que recibirá 150.000 bolívares por concepto de utilidades y que con ese dinero apenas podrá abonar a la deuda de sus tarjetas de crédito. “No me alcanza ni para pagar la totalidad de la deuda”, dijo.

Este año, contó, no comprará ropa, no podrá ahorrar o adquirir dólares. Tampoco organizará la tradicional cena de fin de año. Además, las uvas quedarán en el recuerdo porque a 8.000 bolívares el kilo le resulta difícil continuar la tradición.

Juan Carlos Luna, técnico en mercadotecnia con 12 años de experiencia, contó que las utilidades le alcanzarán apenas para comprarles los regalos a sus 2 hijas y para preparar unas pocas hallacas.

“Antes, mi esposa empezaba a arreglar la casa en octubre. Se pintaba primero para después decorar y siempre incluía nuevas cosas. También compraba los regalos, pero esta vez no habrá nada de eso”, dijo. Aseguró que hasta llegó a pagar la inicial de un carro con las utilidades.

Andreína Rojas también recuerda con añoranza sus anteriores fiestas navideñas. Es diseñadora y espera recibir 50.000 bolívares de utilidades. “No alcanzan para nada”, afirmó. Se irá a El Tigre, estado Anzoátegui, a pasar las festividades con sus padres y les llevará algún “detallito”. Además, espera poder contribuir “con algo” para la cena porque no tiene para un gran gasto.

Ante ese panorama, economistas recomiendan reunir a familiares y explicarles que  el país atraviesa una severa recesión económica y el momento es muy delicado por la alta inflación. “Hay que apretarse el cinturón, reducir gastos y optimizar el presupuesto con la cabeza fría”, aseguró el economista César Aristimuño.

El economista Luis Oliveros sugiere que hay que ser precavido: “Pocas empresas regresarán en enero por el impacto del reciente aumento de salario” y el empleo podría estar en riesgo.

 

Menos poder de compra

La caída del poder adquisitivo de los trabajadores que perciben el salario mínimo fijado en 27.092,1 bolívares a partir del 1° de noviembre será de 50% a final de año, pero si se compara con la misma fecha de 2012, cuando se cobraba 2.047,48 bolívares, será de 70%, indicó Oliveros.

Si se calcula la pérdida del poder de compra considerando el salario mínimo integral establecido para el próximo mes en 90.212 bolívares, será 7% para el cierre del año y 30% en comparación con la misma fecha de 2012, cuando se devengaba 3.082,48 bolívares.

Oliveros considera que los venezolanos más vulnerables no tienen holgura para satisfacer sus necesidades básicas aunque el gobierno ha aumentado el salario mínimo 180% en un año y el integral 450%, porque  el alza se diluye en la inflación que calculó en 475% al cierre de este año. Destacó que solo la inflación de alimentos ronda 700%, sin incluir el impacto de los precios de los productos importados.

“La inflación de una semana en Venezuela es la de un año en cualquier país de la región”, aseveró. A su juicio, el gobierno no quiere entender que es responsable del alto costo de la vida por su desorden en política fiscal y monetaria.

“Venezuela no había tenido una crisis económica tan severa. La inflación de tres dígitos, alta escasez de bienes básicos y 20% de caída del PIB generan graves distorsiones”, precisó.

Señaló que la escasez podría disminuir con los productos importados,  pero la demanda caerá porque los consumidores no disponen de dinero. Lo peor es que no se vislumbran mejoras porque no hay una política económica coherente.

 

¿Qué hacer con los aguinaldos?

Los economistas César Aristimuño, Luis Oliveros y Ángel García Banchs coinciden en que ahorrar en bolívares es un mal negocio porque la rentabilidad es muy baja. Además, acumular dólares generaría pérdidas porque su precio no aumentaría tan rápido como la inflación. Invertir en bienes queda descartado porque hay poca disponibilidad en activos y los que hay no se pueden pagar con las utilidades.

Pero todos consideran que lo peor es la inacción, y hay que estar protegidos; por ello sugieren:

1.  Pagar las tarjetas de crédito

2.  Cancelar las deudas o préstamos

3.  Comprar un seguro de vida

4.  Invertir en un posgrado

5.  Pagarse un curso de inglés

6.  Restaurar la casa para resguardar el valor del inmueble

 

 

475%

será la inflación al cierre de 2016, según el economista Luis Oliveros

70%

cayó en 4 años el poder de compra del salario mínimo, aunque subió de 2.047,48 bolívares a 27.092,1 bolívares