La Opep teme que sus recortes récord de suministro de petróleo no logren dar equilibrio al mercado ni resolver el mayor superávit de la historia si una segunda ola de covid-19 socava una recuperación económica a finales de 2020, según una investigación interna de la Opep a la que Reuters tuvo acceso.
La Opep, Rusia y sus aliados, grupo conocido como Opep+, dijeron que relajarían los recortes a partir del 1 de agosto, citando una recuperación gradual de la demanda.
El grupo espera que la demanda de petróleo aumente en 7 millones de barriles por día (bpd) en 2021 después de caer 9 millones de bpd este año. La Opep quiere aumentar su producción en 6 millones de bpd en 2021.
Pero la investigación interna de la Opep vista por Reuters, sugiere que esos objetivos podrían peligrar si una segunda ola del virus obliga a nuevos cierres y confinamientos en todo el mundo.
Tal escenario reduciría la demanda en 11 millones de bpd en 2020 y, lo más importante para la Opep, conduciría a más abundantes inventarios, medición clave que la Opep usa para monitorear la eficacia de los recortes de producción.
“Cabe señalar en este escenario que la acumulación general de existencias alcanza un máximo sin precedentes de 1,218 millones de barriles en 2020”, dijo la Opep en una investigación preparada para la reunión del panel de la Opep+ del miércoles, donde los ministros recomendaron reducir los recortes de bombeo.
Tal cifra significaría almacenar el equivalente a más de 12 días de producción mundial de petróleo debido a la escasa demanda.
Bajo el escenario de la “segunda ola”, las existencias mundiales no se reducirían en el tercer trimestre y sólo disminuirían modestamente en el cuarto trimestre, manteniéndose aproximadamente 149 millones de barriles por encima del promedio de cinco años en las naciones industrializadas de la Ocde.
La Opep ha dicho que quiere mantener los inventarios en o por debajo del promedio de cinco años. Su escenario base actual prevé que las existencias de la Ocde se mantengan 104 millones de barriles por debajo de un promedio de cinco años en la Ocde para fines de 2020 después de una reducción más adelante en el año. Reuters