Si ya era caro un atún pequeño que hasta la semana pasada se podía encontrar en 205 bolívares,ahora su precio es de Bs. 350 de 140 gramos, mientras el tamaño que le sigue cuesta Bs. 435 de 184 gramos.
Quienes pasaban por el lado de estos costos enlatados en un supermercado en Los Ruices, los tomaban en sus manos miraban el precio y con cara de indignación comentaban: “En el estante te vez más bonito”, sin pensarlo desistían de comprarlos y allí se quedaban, en la espera de alguien que cada día se ve en la obligación de resignarse a los nuevos precios que cambian constantemente.
Pero no solo el atún en lata sorprende a los venezolanos, la cebolla de cabeza hizo que más de uno quedara con la boca abierta ante un kilo a Bs. 486,85, pero si decide optar por los granos será peor; el kilo de caraotas rojas a Bs. 1.013,24 y medio kilo Bs. 506,62 y los huevos de 12 unidades a Bs. 295.
Mientras la alta inflación se come el salario en un cerrar de ojos, los venezolanos se las ingenian para sobrevivir a la crisis económica por la que pasa el país, donde los precios de alimentos básicos aumentan cada semana para no decir todos los días. Sumarium