El gobierno argentino anunció que este viernes pagará al Fondo Monetario Internacional (FMI) un vencimiento por 775 millones de dólares por primera vez mediante un préstamo de Catar, a la espera de la aprobación de un desembolso del organismo por 7.500 millones de dólares.
La operación de crédito contempla que Catar le preste a Argentina Derechos Especiales de Giro (DEG, dinero que los países reservan en el FMI) por el equivalente a 775 millones de dólares, precisó una fuente del Ministerio de Economía.
«Es la primera vez en la historia que Catar realiza una operación de crédito con Argentina», destacó la fuente, que pidió al anonimato, y afirmó que esto permitirá que el país sudamericano pague el vencimiento «sin usar reservas».
El crédito fue negociado por el ministro de Economía argentino, Sergio Massa, con el equipo económico de Catar «en absoluto hermetismo». Argentina busca evitar una nueva sangría de dólares de sus alicaídas reservas internacionales.
El préstamo catarí se aplicará este viernes al pago al FMI de vencimiento de intereses. Será cancelado luego con el desembolso que Argentina espera recibir del organismo multilateral un vez que su directorio ejecutivo ratifique, a mediados de agosto, la aprobación de la quinta y sexta revisiones del acuerdo con el país.
El préstamo con el FMI fue tomado por Argentina durante el gobierno de Mauricio Macri como un acuerdo por 57.000 millones de dólares. Al asumir a fines de 2019, el mandatario Alberto Fernández renunció a los tramos desembolsos pendientes y lo renegoció en 2021 como un convenio por 44.000 millones de dólares.
El lunes pasado Argentina pagó al Fondo un vencimiento por 2.700 millones de dólares con yuanes de un swap (intercambio de monedas) vigente con China y un préstamo puente de 1.000 millones de dólares de la Corporación Andina de Fomento (CAF).
Las reservas internacionales de Argentina incluyen, además de los dólares, una porción en oro y también otros instrumentos como los yuanes provenientes del swap con China.
En Argentina rige desde 2019 un sistema de control de cambios y varios tipos de cambio funcionan en paralelo al oficial.
Históricamente los argentinos apuestan al dólar para prevenirse de la depreciación de su moneda, el peso, y este comportamiento se agudiza en las cercanías de un proceso electoral.
El próximo 13 de agosto se realizarán las elecciones primarias para definir los candidatos que competirán en las presidenciales del 22 de octubre cuando se renueven además la mitad de la cámara de Diputados y un tercio del Senado. AFP