El Santiago Bernabéu celebró la victoria 3-0 del Real Madrid frente a la Roma, en un inicio de Champions bastante prometedor para el equipo de la casa blanca.
El partido estuvo lleno de emoción con diversos disparos en ambas porterías por los delanteros de ambos equipos, que definitivamente les dejaron trabajos a los arqueros.
Una de las principales figuras del partido fue el madridista Isco, quién acertó uno de los 3 goles que definieron el encuentro y brindó varias asistencias a sus compañeros con varios pases certeros en el ataque.
El primer gol llegó en el minuto 45, por un tiro libre consecuente de una falta recibida por Isco en campo contrario, por parte de De Rossi. El cobró fue del mismo Isco, quien definió con un preciso disparo a la parte baja del poste izquierdo.
Comenzando la segunda parte llegó el segundo gol, realizado por Gareth Bale asistido por Luka Modric. Con un remate de la izquierda del área hacia el lado derecho de la portería, un disparo cruzado e imposible de parar por el arquero, y así se sumo al 2-0 del Madrid.
Posteriormente ambos equipos realizaron múltiples cambios para reforzar las líneas de juego, tanto el ataque como las defensas, en el transcurso que fue el más disputado del partido, pues el merengue luchaba por aumentar su ventaja y el Roma se negaba a cederles el paso.
Pero el último gol llegó en el minuto 91, con un pase de Marcelo, Mariano definió el tercer tanto con un disparo desde fuera del área hacia el ángulo derecho de la portería.
Pasados cuatro minutos el árbitro finalizó el encuentro que terminó con una derrota de la casa blanca a los italianos.