El gol de penalty de Werner en la ida (0-1) con el que el Tottenham viajó a Leipzig pareció una losa insalvable en vez de un solitario gol más que remontable en el partido de vuelta. El conjunto que dirige Mourinho siguió con su mala racha actual de cinco partidos sin ganar y lo amplió a uno más tras caer (3-0) ante un RB Leipzig que fue tan superior a su rival que en los primeros 21 minutos de partido había marcado tres goles, dos de ellos legales de Sabitzer y otro, anulado por el VAR por fuera de juego, de Werner. Ya en los último minutos del partido, Forsberg puso el definitivo 3-0 en el marcador.
Cierto es que al Tottenham se le han lesionado sus dos potenciales ‘9’, pero la apuesta de Mourinho por poner a Dele Alli de falso delantero centro acabó suponiendo un tremendo error, pues el mediapunta inglés nunca acabó de entrar en juego.
Sí lo hizo Sabitzer. El austríaco fue el total protagonista del partido con sus dos goles y haber participado, con 4 dianas y dos asistencias, en 6 tantos en 7 partidos de Champions para un equipo que hace 10 años se encontraba disputando partidos de Quinta división alemana. Mención merece Angeliño, que asistió al austríaco en el segundo tanto alemán de la noche.
El susto de la noche lo dio Mukiele, quien cayó redondo y sin conocimiento al suelo tras recibir un fuerte balonazo en la cara. El futbolista mostró signos de recuperación en la camilla, aunque fue sustituido.
El proyecto de la Red Bull sigue creciendo y ya está entre los ocho mejores de Europa. El Tottenham de Mou, por su parte, dice adiós a una competición en la que fue finalista pero cuyo ánimo actual dista mucho del brillante conjunto de Pochettino.