«Ramichan» Alex Ramírez electo al Salón de la Fama del béisbol japonés

Alex “Ramichan” Ramírez hizo historia al convertirse el viernes en el primer latinoamericano en ser electo al Salón de la Fama de la Liga Japonesa de Beisbol Profesional (NPB, por sus siglas en inglés) en su quinto año de elegibilidad.

Ramírez, venezolano de 48 años de edad, logró la proeza al obtener 280 votos del Comité de Elección del Comité de Selección de Jugadores, lo que representó 81.7% de los sufragios. Necesitaba 75% para acceder al Templo de los Inmortales de Tokio y superó el requerimiento con creces.

El caraqueño, que en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP) prestó sus servicios para Cardenales de Lara, Caribes de Oriente -ahora de Anzoátegui- y Águilas del Zulia, fue uno de los tres integrantes de la Clase 2023 del Panteón de la NPB. El inicialista estadounidense Randy Bass y el compositor nipón Yuji Koseki también obtuvieron su membresía al selecto club. El primero fue electo por el Comité de Expertos y el segundo por el Comité Especial. Todos serán entronizados en una ceremonia que se efectuará en julio.

La escogencia de Ramírez fue un premio a una prolífica trayectoria en la Tierra del Sol Naciente, porque allí disputó 13 temporadas (2001-2013) de la NPB con Golondrinas de Tokio Yakult, Gigantes de Yomiuri y Estrellas de la Bahía de Yokohama DeNA.

Con esos clubes implantó los récords de más hits (2.017), impulsadas (1.272) y duelos disputados (1.744) por un extranjero, algo que lo convierte en una leyenda viviente de la NPB.

“En realidad me siento muy contento. Gracias a Dios se dieron estas cosas muy importantes de las que le tengo que dar gracias a mis padres, principalmente por enseñarme el respeto que debo tener sobre las otras personas y sobre muchas cosas más. Creo que esto (su escogencia al Salón de la Fama de la NPB) les abrirá las puertas a muchos latinos y personas que están siguiendo mis pasos. Todos pueden tener esa gran oportunidad y la esperanza de pertenecer al Salón de la Fama en el futuro”, dijo un emocionado criollo desde Japón en una conversación telefónica con el periodista Augusto Cárdenas, director de Cárdenas Sports Media.

MÁS LOGROS DEL VENEZOLANO

“Ramichan”, quien fue mánager de Yokohama DeNA durante cinco torneos (2016-2020), se transformó en el quinto foráneo en los anales del circuito japonés en formar parte del recinto de luminarias.

Se unió al ruso Victor Starffin, el estadounidense Wally Yonamine, su paisano Lefty O’Doul y el también norteamericano Bass. De todos los importados, sólo Yonamine y Ramírez se ganaron sus placas en el espacio sagrado de la NPB por elección popular y no por vías alternas, es decir, aquellas que se utilizan cuando un antiguo pelotero no contó con apoyo de los electores del Comité de Selección de Jugadores.

Gracias a sus hazañas en la NPB, donde se coronó en 2001 con Tokio Yakult y en 2009 con Yomiuri, Ramírez se transformó en el tercer miembro más joven del Salón de la Fama, detrás del expatrullero Hideki Matsui y el antiguo lanzador Hideo Nomo, ambos oriundos del Archipiélago. El primero se ganó su cupo al espacio a los 44 años y el segundo con 46 primaveras a cuestas. Ese dúo, al igual que el nativo, laboró tanto en la Major League Baseball (MLB) como en la NPB.

“El beisbol japonés tiene muchos peloteros muy buenos y que llevan muchos años esperando para entrar al Salón de la Fama. Para mí era mi quinto año, y siempre pensaba que de repente iba a durar un poco más en las votaciones, pero me dieron esta gran noticia de que entré y una de las cosas que me enteré es que soy uno de los más jóvenes ingresar al recinto, después de Hideki Matsui y de Hideo Nomo. Eso me enorgullece bastante”, señaló el patrullero que disparó 380 jonrones en la NPB, la segunda cantidad más alta para un invitado, detrás de los 464 empalmados por Karl “Tuffy” Rhodes, slugger oriundo de Estados Unidos que todavía no es inmortal en la NPB.

Entre las plusmarcas más importantes que ostenta Ramírez se encuentran la de más citas consecutivas con al menos 100 remolques (8), así como la de ser el único latino en sonar – como mínimo- de 200 indiscutibles en una justa. Lo hizo en 2007 con Golondrinas al sacudir 204 incogibles.

También se acreditó un par de premios Jugador Más Valioso (JMV) de la Liga Central, que junto con la Liga del Pacífico componen la NPB. Se quedó con el galardón JMV en 2008 y 2009 cuando laboró para Yomiuri. En la primera contienda bateó .319 (de 548-175) con 28 dobles, 45 jonrones, 125 remolcadas y 85 marcadas. En la segunda golpeó .322 (de 577-186) con 35 biangulares, 31 vuelacercas, 103 fletadas y 66 registradas.

Todos esos guarismos fueron logrados gracias a que se adaptó a la filosofía de la NPB, donde es poco común que los beisbolistas de otras naciones tengan éxito. Ramírez reveló la fórmula de su buen desempeño en una NPB, donde intervino en 985 partidos consecutivos para fijar otra marca para extranjeros.

“Siempre he puesto sobre la mesa algo que trato de aconsejar a los peloteros jóvenes que vienen de Venezuela y Latinoamérica para tener éxito en la NPB, y es que tenemos que ajustarnos a este beisbol. La cultura de este país (Japón) es totalmente distinta y es a la que tenemos que amoldarnos, porque ella y el beisbol de acá (Asia) no se va a ajustar a nosotros. Eso siempre lo llevo en mente porque fue lo más duro que viví durante mi carrera. Cuando me pongo a pensar en todas esas cosas digo, ‘wow, gracias a Dios tomé la decisión correcta de acoplarme a la cultura japonesa’”, explicó Ramírez quien forma parte del Meikyukai, el Club de los Peloteros Extraordinarios de la NPB a los que únicamente son admitidos aquellos toleteros con 2.000 o más inatrapables y serpentineros con un mínimo de 200 laureles o 250 salvados.

DEDICATORIA PARA VENEZUELA

“Ramichan”, cañonero derecho que participó en ocho Series de Estrellas de la NPB y ganó un cetro de average de la Liga Central en 2009 con su ya mencionado porcentaje de .322, le dedicó su logro a Venezuela. Considera que los fanáticos de la cuna de Simón Bolívar lo apoyaron mucho a través de redes sociales antes de ser un “miembro del Salón de la Fama de la NPB”.

“A mi gente de Venezuela lo primero que quiero es darle las gracias por ese apoyo que siempre me han brindado y también quiero felicitarla, porque ahora tenemos a otro Salón de la Fama de nuestro país (después de Luis Aparicio que está en la “Catedral de la MLB” desde 1984). Todos somos venezolanos y compartimos esa alegría, ese triunfo y ese amor por el deporte y por dejar el nombre de Venezuela en alto. También quiero darles las gracias a mis padres: Ramón Ramírez y Eladia Capriles por darme ese cariño, ese amor y la enseñanza de tener respeto hacia los demás. Ellos me inspiraron a llevar la humildad por delante. A todos los fanáticos muchas gracias. Espero algún día regresar a Venezuela para compartir este triunfo con todos los fans de allá”, agregó Ramírez quien tiene otro gran anhelo: ser una referente de la LVBP y lo deja claro.

“Dios quiera que con esto se me abran las puertas para que el Salón de la Fama en Venezuela y se me tome en consideración para que también pueda tener ese privilegio, que sería un motivo de gran orgullo para mí y toda mi familia. Ese es uno de mis deseos. El otro es ser algún día mánager de Águilas del Zulia, el equipo que más creyó en mí en Venezuela y así volver de alguna manera a la LVBP que tuve que dejar para perseguir este sueño que estoy viviendo”, concluyó el patrio que exhibió un porcentaje ofensivo vitalicio de .301 (de 6.708-2.017) con 328 tubeyes, 12 triangulares, 380 bambinazos y 866 pisadas de plato.

Prensa LVBP