Óscar Prieto Párraga y Alfonso Saer son exaltados al Salón de la Fama de la LVBP

Óscar Prieto Párraga y Alfonso Saer fueron exaltados al Salón de la Fama del béisbol venezolano, como miembros de la clase 2023, por lo que ya cuentan con sus respectivas estatuillas.

El Comité Histórico del templo supremo inmortalizó a ambas personalidades, según una nota de la LVBP. A Prieto Párraga debido a su gran trayectoria como directivo tanto de los Leones del Caracas como de la liga. En cuanto a “El Narrador”, por su labor periodística de seis décadas, compartida desde sus comienzos con Cardenales de Lara.

Prieto Párraga es hijo de Óscar Prieto Ortiz, mientras Saer fue su aprendiz.

Sus palabras

“Oscar ‘El Negro’ Prieto Ortiz fue mi maestro y la persona que me dio un espaldarazo importante en 1970, cuando yo apenas era un narrador adjunto, al que llamaban de vez en cuando”, mencionó Saer. “Él me llevó a transmitir la Serie del Caribe de aquel año (en el Estadio Universitario), que fue la primera de la segunda etapa del torneo y ganó el Magallanes. Allí pude dar el salto definitivo. Por eso es que, este momento no solo trae a dos personas al Salón de la Fama, sino también nos vincula como hijo y alumno”, agregó.

Tal recuerdo se marcó todavía más en Prieto Párraga, desde el primer momento en que pisó el pabellón de Valencia, a sabiendas de que era protagonista de la primera dupla padre e hijo entronizada en el recinto.

“Llegar hasta acá representa una etapa cumplida, porque me reencuentro con mi papá. Volvemos a estar juntos, y esta vez por la eternidad”, dijo el antiguo copropietario, gerente general y asesor de la divisa capitalina. “Cuando entré al salón donde están todas las estatuillas, me acerqué a la de él y le di las gracias a Dios, porque hace más de 50 años, cuando inicié en el béisbol, jamás me imaginé llegar a esto”, sumó.

Parte de las trayectorias

Con Párraga al frente, el Caracas fue campeón de la LVBP en las campañas 1980-1981, 1981-1982 (tras la que se convirtió en el primer club tricampeón del circuito), 1986-1987, 1987-1988, 1989-1990 y 1994-1995. Mientras que en la Serie del Caribe se proclamó en Hermosillo, 1982, con su ídolo Alfonso “Chico” Carrasquel como estratega.

Saer, por su parte, comenzó su carrera en 1964. En ese entonces, envió previo a los Juegos Olímpicos una crónica titulada “Rumbo a Tokio” a la redacción del diario El Impulso.

“60 años en esta profesión significan un viaje maravilloso. He vivido momentos realmente especiales en esta carrera de periodista deportivo, en muchas áreas, pero ha sido el béisbol profesional mi base todos estos años”, valoró la voz de los Cardenales desde la contienda 1965-1966, la primera del equipo en la LVBP. “Siempre he creído y he ejecutado la inconformidad periodística. Porque si uno no está satisfecho con lo que se hace, en todo momento estarás abierto a seguir aprendiendo”, acotó.