El juego disputado la noche del pasado 21 de noviembre entre Venezuela y Perú de la eliminatoria para el Mundial de la Fifa 2026 se vio manchado tras el incidente que ocurrió en el post partido, cuando la Policía peruana impidió, a los golpes y empujones, que los jugadores de La Vinotinto se acercaran a celebrar, el valioso punto conseguido, con los venezolanos en Lima.
De manera inexplicable, las autoridades locales empezaron a golpear a los jugadores, evitando el paso a las tribunas del recinto.
A Nahuel Ferraresi, defensor central del combinado nacional, se le fue negado el paso de entrenarle su camiseta a los fanáticos venezolanos y fue golpeado por las policías peruanos.
“Son cosas que no deberían pasar. Cuando yo voy a tirarla (la camiseta) para la gente la policía me frena. Me llegaron a pegar dos veces y me rompieron un poco, pero nada grave. Son cosas que no deberían suceder”, señaló el jugador venezolano.
Asimismo, detalló que los directivos de la Federación Venezolana de Fútbol (FVF) y la Conmebol estaban al tanto de lo sucedido “esperemos que puedan hacer algo para que próximamente esto no pase, ni con ninguna selección que venga”.