Los Leones del Caracas dieron muestra de una buena combinación ofensiva y pitcheo, tras vencer a los Tiburones de La Guaira 9-0, firmando así la sexta blanqueada que propinan los brazos capitalinos. El colombiano Harold Ramírez fue clave en el encuentro, al remolcar tres carreras, mientras que el grandeliga Harold Castro conectó su segundo cuadrangular de temporada y pisó el plato en tres oportunidades.
Un total de 14 imparables salieron de los bates melenudos en el encuentro. En el segundo inning José Rondón aprovechó el descontrol del lanzador David Kubiak, que ya había otorgado un par de pasaportes, para conectar un sencillo al jardín izquierdo, que remolcó a Isaías Tejeda con la primera anotación del encuentro.
Un capítulo más tarde, Harold Castro abrió las acciones con un doble. Posteriormente, se estafaría la antesala para luego beneficiarse de un rodado Tejeda, que amplió la pizarra con la segunda carrera de los avileños.
En el quinto inning, el grandeliga de los Tigres de Detroit volvió a ser protagonista al soltar estacazo que aterrizó en las gradas entre el jardín central y el derecho, para colocar la tercera carrera en la causa de los dirigidos por el manager Mike Rojas.
“Estos días estaba muy ansioso en el home, quería hacer más de lo que podía hacer. Hablé con los muchachos para ser más paciente y me funcionó”, comentó Castro a los medios, tras concluir el encuentro. “Con respecto al jonrón, siempre es algo bastante bueno, no estaba pendiente de ese picheo, pero reconocí que era un cambio y lo bateé».
A pesar de que el panorama lucia favorable para la causa caraquista, no fue hasta el sexto inning cuando lograron ampliar la ventaja de forma considerable, al firmar un rally de seis carreras coronados con el triple barre bases de Ramírez.
Wilfredo Tovar aportó con un sencillo remolcador, Castro recibió bases por bolas con la casa llena para que el neogranadino le colocara la guinda al pastel al sonar una línea al jardín derecho que se convirtió en un batazo de tres almohadillas y trajo a la registradora a todos sus compañeros que estaban en circulación. Eduard Pinto siguió la fiesta al sonar sencillo, que sirvió para que el propio Ramírez anotara la novena carrera del encuentro.
“Fui enfocado a hacer mi plan, que llevo siempre cada vez que voy a batear. Me dejaron una recta afuera y la pude conectar”, afirmó Ramírez. “Yo venía inspirado desde el dugout y se me dio mi plan de bateo, quería dar un batazo grande y salió. El público no lo ve así, pero cuando le dan cuatro malas al bateador anterior uno se faja para dar el batazo oportuno”.
Por otro lado, el debutante Matt Pearce se subió al montículo por los capitalinos y durante tres innings solo concedió un par de imparables y dos boletos. Tyler Wagner lanzó otros tres episodios en los que ponchó a cuatro y le sirvieron para ganar su primer juego en la LVBP.