Fanáticos de Messi desbordaron una tienda en Miami y Antonela Roccuzzo tuvo una reacción nunca antes vista

La ‘Messimanía’ no cesa, al contrario, recién arranca y todo parecería indicar que, al menos en un futuro cercano, estaría lejos de terminar. A diferencia de sus dos años en París, donde sus salidas eran limitadas, en Miami, Lionel Messi y su familia tienen una vida más pública: salidas al shopping y al supermercado donde intentan ser uno más del montón, aunque eso es imposible.

Pero, no todo es paz y amor porque el fanatismo que hay por él en los Estados Unidos es tal que es difícil de manejar. En las últimas horas, junto a Antonela Roccuzzo y sus hijos Thiago, Mateo y Ciro, fueron abordados por los fans que se abalanzaron sobre ellos mientras salían de un local comercial y Roccuzzo no pudo ocultar su enojo cuando la empujaron en plena calle.

La furia de Antonela Roccuzzo tras ser empujada

La presencia del campeón del mundo causó una verdadera revolución en el estado de Florida. Todos quieren verlo, tocarlo, abrazarlo y sacarse una foto para poner en la mesita de luz. Pero, muchas veces, las cosas se salen de control y hasta se dificulta el trabajo de los propios efectivos de seguridad. En las redes sociales se viralizaron varios videos, grabados desde distintos ángulos, de una salida que hicieron los cinco en Miami, donde la situación se empezó a descontrolar.

Los fanáticos advirtieron la ubicación de “La Pulga” y lo esperaron a la salida con cámaras y gritos de “Messi, Messi”. De acuerdo a lo que advirtió la cuenta de Instagram @queen.anto, visitaron una tienda de la marca Adidas y por las imágenes, parecería que se retiraron por una salida alternativa. Una persona de la tienda abrió la puerta y por allí pasaron Thiago, con una remera blanca, Mateo, con la camiseta de Inter Miami, y Ciro, con una de Spider Man, y las caras de asombro difíciles de ocultar.

Al advertir la cantidad de gente, la familia caminó directamente al auto que los esperaba a unos pocos metros de la puerta, mientras que los fanáticos mantenían una cierta distancia con ellos. Si bien Leo y Antonela mostraron sonrisas, en unos pocos segundos el panorama cambió rotundamente. La multitud empezó a acercarse demasiado al jugador, a gritar y a tocarlo.

EL VIDEO: