El empleo soñado para muchos implica un buen salario, una jornada de pocas horas y, si es posible, que sea vía remota. Afortunadamente para Kat Norton, esa es su realidad. La joven estadounidense tuvo un golpe de suerte en 2020 y desde entonces su vida cambió. Hoy, con 29 años, ya tiene casa propia, viaja por el mundo y además gana dos millones de dólares al año.
Norton se convirtió en una historia de éxito que surgió de las redes sociales justo cuando iniciaba la pandemia por Covid-19. En ese entonces trabajaba como consultora de gestión, sin saber que su entorno estaba a punto de tornarse diferente. Un día decidió subir su primer video a su cuenta @miss.excel y desde entonces nada fue como antes.
Su clip tenía consejos para utilizar sabiamente la herramienta Excel; rápidamente alcanzó millones de reproducciones: “En ese momento vivía en la casa de mis padres y estaba enterrada en deudas estudiantiles”, contó en un artículo a CNBC. En poco tiempo consiguió los primeros 100 mil seguidores.
Kat sabía que algo bueno podía pasar, así que comenzó a subir constantemente videos con la misma temática. No solo eso, también ideó cursos sobre Excel y los comenzó a vender, tanto a particulares como empresas: “En solo dos meses mis ingresos superaban mi sueldo mensual como consultora de gestión a tiempo completo”, prosiguió.
Con su carrera en pleno auge, la creadora de contenido tomó la decisión de arrancar 2021 con el pie derecho. Dejó su trabajo para dedicarse a su emprendimiento tiempo completo. A partir de ahí, solo cosas buenas pasaron: en marzo de ese año se compró una casa en Sedona, Arizona.
Ahora trabaja desde su hogar, donde tiene instalada una oficina para grabar sus clips, organizar cursos y hacer todas las actividades que su ocupación requiere. “Mi negocio me ha ayudado a tener la vida de mis sueños”, aseguró.
La influencer tenía como principal objetivo ayudar económicamente a su familia, le contó también a CNBC. Por eso, en cuanto tuvo la oportunidad brindó apoyo a su mamá para que se jubilara antes de tiempo y dejara su trabajo como recepcionista.
“La pasamos genial”
Su madre no fue la única persona que se vio beneficiada con el nuevo poder estatus económico de Norton. Su novio, Mike, renunció a su trabajo en una compañía de ventas y se convirtió en el director financiero de la empresa de Kat. Esto les dio la posibilidad de emparejar sus horarios y tener una mejor dinámica de pareja: “Mike y yo la pasamos genial trabajando en Miss Excel y viajando juntos por el mundo”, agregó la joven.
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Una de las mejores partes de su rutina laboral es que solo trabaja “tres o cuatro horas por jornada” y desde el mediodía. “Me aseguro de programar descansos entre tareas para reponerme. Esto me ayuda a ser más eficiente y a trabajar solo entre 15 y 20 horas a la semana”, relató.
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Kat Norton se mostró agradecida por lo que logró en poco tiempo, pero sus ambiciones van todavía más lejos. Aún trabaja en mantener actualizadas sus redes sociales: tan solo en TikTok suma 886.200 seguidores.
por LA NACION