¿Alguna vez te has puesto a analizar el salón de uñas a donde vas a arreglarte las manos y pies? Esto es, ¿lo consideras un lugar seguro , en donde no corres el peligro de contraer alguna enfermedad por falta de higiene?, ¿has notado que los olores a productos químicos son muy fuertes?, ¿las/los técnicas(os) no te ofrecen opciones de servicios?
Sobre esto hablamos con Joaquín Manuel Vega, especialista en manicure y pedicure, y nos hizo las siguientes advertencias.
“Hoy en día vemos salones de uñas o de belleza en casi cada esquina. Sin embargo, lamentablemente no todos los salones reúnen las cualidades que debemos tener en cuenta cuando les vamos a entregar nuestras manos y pies para que nos los arreglen”, puntualizó Joaquín Manuel.
Sobre las precauciones que debemos tener en cuenta, Vega nos enumeró las principales.
En Estados Unidos debes asegurarte de que el propietario tiene licencia de operación emitida por el estado correspondiente y las/los manicuristas/pedicuristas tienen su acreditación y licencia al día.
“Sin embargo, es muy importante que sepas que aunque tengan sus permisos y licencias al día, hay otros muy importantes detalles que debes vigilar para saber si este es un lugar seguro”, continuó Joaquín Manuel.
Las herramientas que utilizan. Para protegerte de una exposición accidental a enfermedades como la hepatitis, asegúrate de que las tijeras y cortaúñas se desinfecten después de cada uso y que solo se utilicen limas desechables.
En cuanto a la pedicura, asegúrate de que la tina en donde se ponen los pies esté limpia y debidamente desinfectada. “Si no están bien aseadas, las tinas donde colocas los pies al hacerte la pedicura son un criadero de gérmenes. Esto ocurre especialmente con aquellas que son de tipo jacuzzi o masajeadoras, pues la piel muerta se queda atrapada. Asegúrate de que estas estén debidamente desinfectadas.
En estos salones los olores de los productos, por lo general, son muy fuertes y en algunos casos tóxicos, asegúrate de que este tenga buena ventilación. “Exponerse a productos químicos peligrosos resulta dañino para el organismo. Si sientes que el olor del esmalte es muy fuerte, mejor desiste. Esto lo puedes evaluar si tus ojos lagrimean al ingresar al local”.
Asimismo con las herramientas y equipos que utilizan. “Un kit de herramientas con gérmenes puede transmitir enfermedades y hongos. Además, algunos utensilios como las esponjas o limas acumulan la piel muerta de otras personas, por lo que solo deberían tener un solo uso. Para evitar todo lo anterior, siempre recomiendo firmemente que lleves tus propias herramientas”.
Examina el nivel de habilidad de los/las técnicos(as). La mayoría de las profesionales de las uñas están capacitadas en lo básico; sin embargo, con las nuevas tendencias procura escoger un salón en donde te ofrezcan las novedades y nuevas técnicas de manicura o pedicura. Es decir, materiales, colores, estilos, etc.
Hablando de los colores y materiales, el experto nos recomendó utilizar nuestros propios productos. “Si puedes, sería bueno que siempre llevaras tu esmalte para uñas, idealmente una versión no tóxica”.
Examina la higiene del salón en general. “El estado de limpieza en que se encuentre el lugar te va a indicar mucho sobre los estándares del lugar. Los sitios básicos que debes considerar además de lo antes mencionado, equipo y herramientas, son el baño y las esquinas”.
Recuerda en tu próxima cita para arreglarte las manos y pies examinar todo lo anterior porque si el salón falla en alguno de los puntos anteriores, debes considerar cambiar de lugar. Con la salud no se juega.
Fuente: Siempre Mujer