No tenía hogar, la grabaron cantando en el metro y se volvió famosa, pero todo terminó mal

Millones de personas se conmovieron con su voz. La mujer de Moldavia de 52 años, que se había quedado sin hogar por no poder pagar sus gastos médicos, sorprendió a un policía con su impactante interpretación de la ópera “O mio babbino caro” en los fríos pasillos del subte de Los Ángeles. El hombre la grabó, publicó el video en las redes sociales y en unas pocas horas, Emily Zamourka era la nueva estrella viral.

Por: Clarín

Mientras las reproducciones se multiplicaban y los medios contaban la dramática historia de la mujer, sus nuevos fanáticos recolectaban dinero para ayudarla a salir de la calle. No tenía nada más que un pequeño carrito en el que cargaba sus pocas pertenencias, aunque solo se lamentaba por haber perdido una cosa: su violín. Sin embargo con sus cuerdas vocales alcanzaba para mostrar su talento.

La mujer había llegado a Estados Unidos hacía más de dos décadas, escapando de la Unión Soviética. Parecía que lo peor había quedado atrás. Comenzó a trabajar como profesora de violín y piano y en 2004 obtuvo su residencia que la habilitaba a vivir legalmente en el país. Un año después comenzaron las desgracias. Una grave enfermedad le afectó el hígado y el páncreas, aunque la peor consecuencia fue económica.

Su salud se recuperó, pero su cuenta bancaria quedó quebrada por los altos gastos médicos que le demandó el tratamiento. Lo perdió todo. Según describió el diario El País, un amigo la recibió en su casa de Glendale (California) pero al poco tiempo el hombre sufrió un infarto y perdió la vida. No tuvo alternativa más que vivir en las calles.

Vivía con el dinero que le dejaba le gente por tocar el violín, su preciado instrumento. Pero entonces recibió el peor de todos los golpes: alguien le destruyó el instrumento valorado en 10.000 dólares. “Era mi tesoro y también mi fuente de ingresos. Lo era todo”, contó ella tiempo después.

Del metro de Los Ángeles a la fama mundial

Llevaba una década en las calles cuando se cruzó con un agente de policía Alex Xavier, quien el 24 de septiembre del 2019 contó en su cuenta de Instagram que había conocido a una mujer sin hogar. Ella lo sorprendió porque no se victimizó por su situación, ni culpaba a nadie por no tener vivienda. Simplemente le dijo que le gustaba cantar y él le pidió que lo hiciera… Estaba descubriendo a una estrella.

El oficial quedó tan sorprendido con su talento que la grabó y compartió el video en las redes sociales. Boom, en segundos pasó a ser un fenómeno viral, un impresionante hit de las redes sociales. La historia cambiaba para ella. Por primera vez tenía una oportunidad de vivir una vida mejor.

CNN, Fox, CBS, ABC, las principales cadenas televisivas de Estados Unidos contaron su historia y rápidamente se organizó un recital para el barrio italiano de Los Ángeles, la mujer que cantaba un clásico de la ópera de Giacomo Puccini, era la indicada para el evento.

Además, sus nuevos fans organizaron una colecta y le donaron más de 80 mil dólares y un gran productor musical, Joel Diamond, con 36 discos de oro y platino le ofreció grabar un disco. Sin embargo los días empezaron a pasar y el amor por Emily se fue esfumando. Su nombre quedó en el olvido y, meses después, la irrupción de la pandemia de coronavirus arrasó con todo.

Los medios la agobiaron en sus días de fama y, poco más de dos años después, nada se sabe de ella. Se dijo que la vieron juntando agua de una alcantarilla meses después de su furor viral. Nada más. El disco que Diamond había ofrecido nunca se grabó y todo terminó de un día para el otro.

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