Los «niños psicópatas» existen, y estos son la prueba de ello.
Beth Thomas, es una niña que no será ni la primera ni la última en ser etiquetada como “niña psicópata”. Su historia se repite en diversos sucesos.
Por ejemplo, Eric Smith, que en 1994 asesinó a Derrick Robie estrangulándolo, desfigurándole el rostro con rocas y, por último, sodomizándolo. Derrick contaba con cuatro años cuando Eric acabó con su vida.
O el caso de Joshua Phillips, de 14 años, golpeó a una vecina hasta la muerte. Ella tenía ocho años, pero lo más inquietante del caso es que Joshua escondió el cadáver bajo la cama. Cuando el olor de la descomposición hizo acto de presencia y el chico confesó a su madre el crimen, apuñaló el inerte cuerpo hasta más de once veces.
La locura y el trastorno, cobijados desde que la persona nace, están aletargados, esperando para subir a la superficie en el peor momento del ser que han invadido desde que el mundo es mundo, indica un artículo de Gonzoo.