Ford asumirá pérdida de US$1.500 millones para retrasar su producción de vehículos eléctricos

Ford asumirá unas pérdidas de hasta 1.500 millones de dólares tras anunciar que retrasará y ralentizará su programa de producción de vehículos eléctricos (VE) en favor del desarrollo de automóviles híbridos en Norteamérica.

El fabricante estadounidense presentó la decisión como una medida para conseguir «un negocio de vehículos eléctricos rentable, eficiente en términos de capital y creciente» así como para que los consumidores tengan más opciones de automóviles con menores emisiones de CO2.

En la práctica, Ford ha cancelado la producción de un todoterreno SUV eléctrico con tres filas de asientos, que inicialmente debía producirse en la planta canadiense de Oakville en 2025 y que en abril de este año ya fue retrasado a 2027.

La cancelación del proyecto le costará inicialmente a la compañía 400 millones de dólares. Pero el director financiero de Ford, John Lawler, advirtió en un comunicado que la cifra final puede situarse en los 1.500 millones de dólares.

Además, Ford retrasará a 2027 la producción de vehículos eléctricos en una nueva planta que está siendo construida en el estado de Tennessee.

Estaba previsto que la planta, en la que la compañía está invirtiendo 5.600 millones de dólares, iniciara la producción de una nueva generación de camionetas «pick up» eléctricas en 2025.

Ford dijo que la factoría sí mantiene el inicio de la fabricación de baterías en el próximo año.

«Estamos comprometidos a crear valor a largo plazo con el establecimiento de un negocio competitivo y rentable», explicó Lawler.

«Con la compresión de precios y márgenes hemos decidido ajustar nuestra hoja de ruta de productos y tecnologías, así como nuestra dimensión industrial para cumplir el objetivo de alcanzar un Ebit positivo en los 12 primeros meses del lanzamiento de todos nuestros nuevos modelos», añadió el ejecutivo.

Ford apuntó que el mercado de vehículos eléctricos está «evolucionando rápidamente» a medida que los fabricantes chinos aprovechan sus estructuras de costos «para ampliar su cuota del mercado global».

La nueva hoja de ruta supone que en 2026 empezará la producción de una nueva furgoneta comercial eléctrica en la planta de montaje de Ohio y en 2027 la de dos nuevas camionetas «pick up» eléctricas.

Una de estas camionetas, de tamaño medio, será el primer vehículo de Ford que utilizará una nueva plataforma que ha sido desarrollada para reducir el precio de los vehículos.

La segunda camioneta, conocida internamente como T3, aparecerá en la segunda mitad de 2027 aprovechando la experiencia de la actual F-150 Lightning.

El presidente y consejero delegado de Ford, Jim Farley, afirmó que estos cambios en la planificación son fruto de la experiencia de la compañía como «el segundo fabricante de vehículos eléctricos en Estados Unidos». EFE