Un espeluznante hallazgo sacude al departamento de Bolívar, Colombia, donde una mujer fue trágicamente asesinada y despojada de sus brazos. La víctima, identificada como Delimar Colmenares, de 28 años y de origen venezolano, fue encontrada sin vida en las turbulentas aguas del río Magdalena.
La joven madre, quien emigró a San Pablo, Bolívar, en búsqueda de un futuro mejor para sus cinco hijos, había desaparecido misteriosamente desde el 24 de febrero. Delimar había salido de su hogar acompañada por su pareja, un hombre de 30 años cuya identidad aún no ha sido revelada y cuyo cadáver también fue descubierto flotando en el mismo río días atrás.
Las autoridades han iniciado una intensa investigación para desvelar las circunstancias que rodearon estremecedora muerte de Delimar. Los forenses trabajan contra reloj para determinar las causas del deceso, en medio de la conmoción que embarga a la comunidad, especialmente al saber que la vida de esta joven fue trágicamente truncada y sus hijos quedan ahora huérfanos.
El brutal crimen desató una ola de repudio y consternación, provocando un clamor de justicia entre la población y una firme condena a la violencia desmedida que costó la vida de Colmenares. La incógnita sobre el motivo del doble homicidio y la identidad del o de los responsables mantiene en vilo a los habitantes de la región.
La tragedia pone rostro a la dura realidad que enfrentan muchos inmigrantes que buscan refugio y oportunidades en tierras colombianas, resaltando las vulnerabilidades a las que están expuestos.
con información de Nueva Prensa Digital