Un obrero fallece ahogado tras quedar atrapado en un tanque del acueducto municipal de Umuquena en el estado Táchira. Las labores de rescate de los familiares y amigos del trabajador fueron infructuosos por la desesperación de la víctima.
La víctima fue identificada como Énder Antonio Pérez Chacón, de 43 años y nacionalidad venezolana, con residencia en el sector La Hojita, quien en coordinación con otras personas se introdujo en el tanque de la toma “La Bujona”, perteneciente al acueducto municipal de la parroquia Umuquena, municipio San Judas Tadeo, con la finalidad de efectuar labores de limpieza.
“El agua estaba llegando muy turbia y se pensó que el momento era propicio para limpiar el tanque, lo cual no se hacía desde hace algún tiempo, pero lamentablemente uno de los pies de Énder Antonio fue succionado por el drenaje, con tal presión que no era posible sacarlo por sus propios medios”, comentó uno de sus amigos. “Él comenzó a gritar en demanda de auxilio y una sobrina que se encontraba cerca corrió a prestarle ayuda, pero a pesar de sus esfuerzos no logró sacarlo.
El tanque se estaba llenando y la gente se afanaba por sacar al obrero, pero la presión era tan fuerte que no lo lograron y, lamentablemente, murió ahogado, cuando el agua lo cubrió por completo, se dijo más adelante.
El hecho fue notificado a las autoridades policiales y una comisión de la Brigada Contra Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas, base Norte, con sede en La Fría, se trasladó para el inicio de las investigaciones y proceder a la extracción del cadáver, que fue trasladado a la morgue del Hospital Central de San Cristóbal para la autopsia de ley.
Los detectives realizaron una inspección del lugar y fijación fotográfica, al tiempo que citaron a familiares del ahora occiso y testigos presenciales para que acudan este lunes a la sede del CICPC y sean entrevistados sobre la manera cómo ocurrieron los hechos. Se hizo la notificación al Ministerio Publico y se dio inicio a una averiguación por muerte accidental.
Fuente: La Nación