Se negó a dejarla. La adolescente de 17 años que resultó muerta de un machetazo en la cabeza el pasado 6 de junio en el caserío Barrancas del sector El Cauro, municipio Morán en el estado Lara al parecer, fue asesinada por su cuñado, con quien mantenía una relación amorosa.
Cuatro días después del crimen, los funcionarios del Eje de Homicidios del Cicpc se trasladaron nuevamente hasta el sitio para continuar con las investigaciones e interrogar a los vecinos. Fue ese día que lograron dar con un hombre que, supuestamente, le enviaba mensajes acosadores a la joven.
Fuentes ligadas a las investigaciones contaron que el hombre declaró que él no le enviaba mensajes a la joven, pero que algunas veces le prestaba el celular a su primo Luis Antonio Pérez Benítez (22) quien estaba casado con la hermana de la víctima y a su vez mantenía relaciones amorosas con la fallecida desde hace seis meses.
Los detectives llegaron hasta la vivienda del hombre, en donde vivía junto a la hermana de la adolescente y comenzaron a interrogarlo, pero no quería hablar, y no fue sino minutos después que, aparentemente, confesó el crimen.
Detallaron las fuentes que el Cicpc logró ubicar el machete con el que Luis la asesinó además de la ropa que llevaba puesta el femicida el día del crimen. Ese día el presunto criminal pidió hablar con el padre de la joven y le pidió perdón por lo que le hizo a su hija.
El 6 de junio en la mañana, supuestamente, Luis llegó a la casa de la joven porque quería hablar con ella, pues no quería dejarla. Al parecer la joven le explicó que ya no podían seguir con su relación porque ella tenía su novio y se casarían en diciembre. Tras la decisión de la joven, Luis se fue de la casa, pero regresó minutos después, mientras ella veía televisión y fue cuando, aparentemente, él agarró su machete afilado y la hirió en el cuello, dejándola muerta.
No fue sino hasta las 5:00 de la tarde que la hermana (pareja de Luis) junto a su hijo la encontraron muerta, reseña Prensa de Lara