Sexagenario quemado por delincuentes fue “pichado” por su propia amante

Los detalles del crimen de Elías Antonio López, de 69 años, salieron a la luz. Su amanteplanificó robarle su camioneta TrailBlazer y otras ocho personas la ayudaron, pero murió de un infarto y para deshacerse del cadáver, decidieron quemarlo y enterrarlo en la casa de la mujer a quien en principio se le identificó como una “amiga”.

Las investigaciones tomaron el rumbo correcto desde el principio, la familia inició la búsqueda el pasado viernes luego de que López, quien era jubilado petrolero, saliera a sacar dinero del cajero automático y no regresara a tiempo para llevar a su esposa al trabajo. Denunciaron ante los cuerpos de investigación e informaron de la desaparición a través de una rueda de prensa.

La familia se guardó un detalle: Una amante. López tenía un amorío extramarital, su familia sólo reveló esta información a los investigadores y de inmediato los trabajos se orientaron hacia la mujer, Roxana, quien es conocida como “La beba”.

Ella, junto a sus amigas “Vanessa” y “La Mami” llamaron por teléfono a López, le pidieron dirigirse a una casa en el barrio Virgen del Carmen de Maracaibo, a donde el sexagenario había ido en otras oportunidades para visitar a su amante. Llegó a la casa a bordo de su camioneta, donde dos hombre, los hermanos “Salvador” y “Casai”, sometieron a la víctima, lo amarraron a una silla de hierro. Luego se llevaron la camioneta.

En el hecho también participó “La Chichi”, quien es hermana de Roxana, quien también vivía en la casa donde se registró el crimen con una de sus tías, ambas son oriundas de Barranquilla, en Colombia, entidad a la que se presume que hayan huido, reseñó Noticia Al Día.

López no resistió la situación, estaba asustado, eso le causó un paro cardiaco, y los malhechores no sabían qué hacer con el cadáver, por lo que decidieron quemarlo, necesitaban ocultarlo, por lo que contrataron a un joven para que abriera un hueco en la parte trasera de la casa, así lo hizo, y allí ocultaron el cuerpo, en la fosa con forma de “L” quedó el cuerpo con la cabeza hacia abajo.

El joven, José Alfredo González, alias “El Pua Pua”, fue detenido por los efectivos. Confesó lo ocurrido, pese a haber mentido en varias oportunidades y finalmente su declaración permitió a los investigadores localizar la fosa cavada por un hombre llamado Marcial, quien también está detenido y quién en principio había asegurado a los funcionarios que había abandonado el trabajo por la poca paga y la tierra dura.

La dureza de esta tierra casi hace a los funcionarios abandonar la búsqueda, luego descubrieron que se trataba de rocas de asfalto, que habían colocado los delincuentes para tapar el cadáver, cuando lograron extraerlas, un fuerte olor alertó sobre la ubicación del cadáver.

Luego de descubrirse que la amante de López sería la autora intelectual del hecho, la esposa e hijos de la víctima asumieron una actitud hermética y no han brindado declaraciones al respecto.

CD