Familiares exigen a las autoridades justicia para que el caso de la joven de 20 años no quede impune. Leydi estuvo en UCI cerca de tres meses tras acudir a un odontólogo para la sustracción de una muela.
Leidy Contreras, la venezolana de 20 años que acabó en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Loayza tras sacarse la muela en una clínica de Chorrillos, Perú, falleció la noche del pasado domingo 16 de abril.
“Lo que los doctores nos decían era que su deterioro iba en progreso, iba en decaída y obviamente el daño que tenía era irreversible y en cualquier momento podía fallecer. Desde el principio nos habían dicho, pero en estas últimas semanas su deterioro fue en caída, fue fuerte. Obviamente ya su cuerpo no aguantaba tanto y falleció anoche”, dijo su hermana.
Como se recuerda, la joven acudió a la clínica Quirodent para extraerse la muela. Ella llegó al lugar por recomendación, sin imaginar que este no contaba con los permisos correspondientes, trabajando de manera clandestina. Lamentablemente, Leidy sufrió un shock séptico que la dejó en UCI por tres meses, hasta su deceso.
Frente a esta situación, la hermana de la joven exige justicia, pues hasta ahora los médicos que atendieron a la joven no se han hecho responsables de lo sucedido.
“Con respecto a estos doctores de la clínica Quirodent, no han ido a la tercera citación. Uno de ellos fue a la última, pero dijo tantas cosas con palabras técnicas que rechazaron su declaración y volvieron a darle una nueva cita. El otro doctor se justificó con cosas que su abogada estaba enferma y no pudo asistir. Quieren que su declaración sea virtual cuando han contratado un buffet de abogados y ponen estas excusas baratas”, manifestó.
La Hermana de Leidy pidió ayuda para devolver las 57 unidades de sangre al hospital Loayza. “La atención en el hospital siempre fue buena. Hicieron todo lo posible. Ahorita tengo que hacer cancelación de sangre, a ella le transferían diario. Son 57 unidades, debo cancelarlas, porque de lo contrario no me dan el cuerpo”.