El macabro plan no les salió como lo esperaban. Una “examante” planificó el homicidio del ingeniero y lo perpetraron el lunes. La mujer, y dos hombres, fueron los autores materiales del crimen de Omar Leal Ortega. Los tres fueron capturados por funcionarios de la División de Homicidios del Cicpc, reseñó Panorama.
Por Angelina Estrada
El procedimiento se practicó, cerca de las 12:30 de la tarde de ayer, 18 horas después de que los delincuentes acabaran con la vida del ingeniero dentro de su propia residencia, en la calle 79 con avenida 74, en la urbanización Gilcon, al oeste de Maracaibo.
Fuentes policiales ligadas al caso informaron que la mujer, de unos 30 años, y con quien el ingeniero, de 60, mantenía un romance a escondidas, fue el “cerebro” del robo que terminó en asesinato, registrado, aproximadamente, las 4:30 de la tarde del pasado lunes.
“La mujer fue quien maquinó el robo que terminó en homicidio. Ella comentó el plan a otros dos hombres con quienes luego de robar cosas de valor de su víctima, perpetró el crimen”, dijo una fuente.
Tras labores de inteligencia efectuadas por funcionarios de la policía científica, los delincuentes fueron detenidos cerca de las 12:30 de la tarde de ayer, en la avenida 73 B de la urbanización Las Lomas, a menos de diez cuadras de la residencia del ingeniero.
En la misma casa donde los criminales estaban enconchados, la policía incautó dos televisores pantalla plana entre otras pertenencias de valor que fueron robadas de la casa del ingeniero.
Vecinos de la zona donde se practicaron las detenciones comentaron que la mujer estaba vinculada a una banda de delincuentes que opera en el barrio 14 de Noviembre, adyacente a donde fue asesinado Leal Arteaga.
“En ocasiones, a ella se le veía con delincuentes que operan en sectores cercanos”, aseguraron.
A las 4:30 de la tarde del lunes, el humo que salía por una de las ventanas de la casa donde el sexagenario vivió durante más de 20 años, alertó a sus vecinos sobre una situación irregular.
Efectivos del Cuerpo de Bomberos de Maracaibo, quienes acudieron al sitio para sofocar las llamas, encontraron el cadáver en uno de los baños de la residencia.
A Leal Ortega lo atacaron a puñaladas, fue degollado. Luego, sus extremidades inferiores fueron consumidas por las llamas.
“Él era un hombre muy trabajador, humilde y tranquilo. Era la cabeza de la familia, por cariño lo llamábamos ‘Tío Chichí’, es muy doloroso que haya muerto de esta manera”, informó un pariente de la víctima.
Leal Arteaga era ingeniero civil y tenía una oficina en su casa. Prestaba sus servicios en el área de mantenimiento a diversos clubes de recreación en Maracaibo.