Un paciente que se encontraba interno en la Unidad Cuidados Intensivos del Hospital Victorino Santaella de Los Teques murió luego de que misteriosamente desapareciera la mascarilla que mantenía la saturación de oxígeno.
Según reporta la página web El Tequeño, los hechos habrían ocurrido entre el 8 y 9 de febrero cuando Gustavo Granja, se encontraba hospitalizado en el área de UCI, para recibir terapia respiratoria alternando mascarillas CPAP, que mantenía una saturación por encima de los 93%, con una mascarilla de reserva, que presentaba un promedio de 80% de saturación.
“Los médicos informaron a familiares que la mascarilla CPAP había cumplido su función y que lo mantendrían con la mascarilla de reservorio, a pesar de que la saturación había bajado a 76%, por lo que le fue colocada la CPAP nuevamente en el transcurso de la tarde fue nebulizado a las 7 pm y a las 11:00 pm le tocaba colocar nuevamente el CPAP, y cuando se la iban a colocar, la mascarilla no se encontraba en la habitación”, señalan familiares.
La falta de oxigenación le provocó desaturación, arritmia cardíaca y frecuencia respiratoria disneica, el personal de enfermería de guardia, intentó reanimarlo sin asistencia de los doctores, que no se encontraban en el área, pero sufrió insuficiencia respiratoria y murió” .
Los familiares exigen que les expliquen sobre el paradero de la mascarilla CPAP y solicitan a la directiva realizar una investigación que permita dar con la persona responsable del hurto o desaparición de la mascarilla.