Luego de que los parientes de las víctimas denunciaran que no llegaron a tierra firme, han sido perseguidos para obligarlos a que no difundan más información. El peñero Ana María partió el jueves 16 de mayo desde Güiria y se desconoce su paradero, tampoco hay rastros de naufragio hasta el momento.
Caracas. Los familiares de los desaparecidos que viajaban en el peñero Ana María, desde Güiria a Trinidad y Tobago, no solo deben lidiar con la desinformación, también con amenazas de desconocidos.
Luego de las denuncias en los medios de comunicación y a las autoridades un pariente de una de las víctimas recibió un ultimátum. Incluso los funcionarios que se encuentran en el muelle principal, conocido como La Playita, le recomendaron no acercarse a la zona para que su vida no corra peligro.
En vista de esta situación, otros parientes consultados por Crónica.Uno pidieron mantener su anonimato, pues temen que sus declaraciones pongan en peligro la vida de quienes viajan en ese bote.
Carlos Valero, diputado a la Asamblea Nacional, denunció que varios parientes han sido víctimas de persecución:
«Parece extraño que después de que nos dedicamos a investigar las diferentes hipótesis de la embarcación Ana María, inició una fuerte persecución en contra de los familiares que han aportado información, incluso han sido amenazados de muerte”.
Exigió a las autoridades ofrecer máxima seguridad a quienes se encuentran en Güiria esperando obtener noticias de sus seres queridos desaparecidos.
El jueves 16 de mayo aproximadamente 36 personas zarparon desde La Playita, en Güiria, alrededor de las 4:30 p. m. No llegaron a tierra firme. Los familiares de los desaparecidos —que viven en Güiria— alertaron a los funcionarios de Protección Civil (PC) del municipio Valdez de Güiria y a la Guardia el sábado 18 de mayo, día en que se activó el operativo de búsqueda.
En la embarcación viajaban niños y una mujer con siete meses de embarazo.
De acuerdo con Valero, el sábado rescataron a Alberto Abreu, luego de 19 horas en el agua. Se encontraba a 30 millas de la costa de Trinidad y asegura que viajaba en el peñero Ana María.
La tarde del martes 21 de mayo hubo una reunión en La Playita con los familiares de los desaparecidos. Algunos de ellos no son de la zona y tuvieron miedo ante tanta gente desconocida que acudió.
“Ya saben quiénes son los familiares, casi me da una crisis de nervios al ver a tanta gente con actitudes extrañas, porque esa fue una reunión pública. Uno no sabe quién es quién y si realmente ese bote está secuestrado, como se cree, seguramente había personas de esa banda haciéndose pasar como vecinos del pueblo para ficharnos. Eso parecía una guerra de minitecas de la cantidad de personas que había, gente vendiendo, gente que nos preguntaba de quién éramos familiares”, contó un pariente de forma anónima.
Han transcurrido seis días desde que zarpó el bote y las labores de búsqueda tanto en Trinidad como en Venezuela no han tenido resultados. Ni siquiera hay algún rastro que pueda confirmar si se trató de un naufragio.
“En la reunión nos dijeron que se buscará por siete días. Pero ¿qué pasará después de esos siete días? En el caso de que eso no haya sido un naufragio sino un secuestro, por qué no envían a expertos para que los busquen”, comentó.
La AN designó una comisión especial para investigar la desaparición de este bote y el siniestro del 23 de abril del peñero Jhonnalys José, con aproximadamente 38 personas a bordo, del cual solo localizaron a nueve sobrevivientes y rescataron un cadáver.
Los diputados Valero y Robert Alcalá la integrarán, acompañados por José Noriega, Denncis Pazos y Milagros Paz.
Andy Villegas, entre los desaparecidos
El jueves 16 de mayo Andy Gregorio Villegas López, de 32 años, partió hacia el muelle de Güiria. Por la crisis económica del país decidió emigrar. En Trinidad lo esperaba un familiar.
El costo del pasaje ronda los 300 dólares. En Güiria trabajaba por su cuenta y es cabeza de familia; padre de un niño.
“Todos en el país estamos buscando manera de salir para progresar y ayudarnos. Mientras él estuviera allá nos iba a mandar dinero para poder sobrevivir, porque tampoco es que podríamos derrochar el dinero”, dijo su esposa, Mary de Villegas.
Más de 50 desaparecidos en menos de un mes
En menos de un mes dos embarcaciones han sido noticia entre Güiria y Trinidad y Tobago. El 23 de abril naufragó Jhonnalys José después del paso de Boca del Dragón, el más peligroso de las dos horas y media de camino, por la corriente.
En este caso nueve personas fueron localizadas con vida y se rescató el cadáver de una adolescente de 16 años. Fuentes consultadas por Crónica.Uno comentaron que a la mayoría de las pasajeras, jóvenes y adolescentes, las captó una red de trata de personas que opera entre ambos países.
En el caso del bote Ana María los parientes tienen la sospecha de que fue sometido por miembros de esta red. Sin embargo, esta información no ha podido ser corroborada de manera oficial, reseña Yohana Marra @yohanamarra/Crónica Uno