Los nombres de José Antonio Tovar Colina, “Picure”; de su adversario Antonio Bravo Sánchez, “Juvenal”, y de Carlos Luis Revete, “Coki”, delincuentes implicados en homicidios, secuestros, extorsión, droga, robo y hurto de vehículos han ganado centimetraje en la prensa nacional luego de los operativos no exitosos que los organismos de seguridad han realizado en el país para dar con estos criminales que lideran megabandas delictivas, que han ganado territorios en varias entidades.
“Picure”, que al igual que “Juvenal” opera en Guárico y Aragua, y además domina áreas del Distrito Capital, está incluido junto con su enemigo en la lista de los 40 más buscados del Cicpc y ambos están solicitados por la Interpol. Sin embargo, las autoridades no han dado con ellos, pese a los procedimientos que han realizado. Solo en 2015 al menos nueve lugartenientes de la banda liderada por Tovar han sido ultimados en procedimientos policiales y hasta entonces el Estado no ha aclarado en qué condiciones el criminal resultó herido de bala el 26 de septiembre en un presunto operativo policial.
“Coki”, líder de una megabanda que opera en El Paraíso, la Cota 905 y El Paraíso, está prófugo desde el 13 de julio de 2015 cuando distintos cuerpos de seguridad del Estado iniciaron la Operación Liberación del Pueblo en la Cota 905 para dar con él.
Delincuentes pueden imitar perfiles. A juicio del criminólogo Fermín Mármol García, el riesgo es que otros delincuentes, conscientes de la impunidad que hay en el país y de la rentabilidad que les ha generado el delito a estos criminales, imiten sus perfiles.
“El no emplear la seguridad ciudadana para dar con delincuentes de alta peligrosidad es negativo. Se debería tener un portal con la información de los más buscados, difundir datos de ellos a través de medios de comunicación y estudiar una recompensa y resguardar el anonimato a quienes con información veraz y oportuna ayuden a dar con ellos”, precisó.
Mármol García advirtió que los organismos de seguridad carecen de tecnología y recursos para la investigación criminal, por lo que el Estado debería invertir en esta área.
José Antonio Tovar Colina
“Picure”
José Antonio Tovar Colina, de 26 años de edad, se consolidó como líder de la megabanda que representa desde 2008 según reportes policiales, cuando el grupo delictivo se formó luego de que varias agrupaciones se unieron en una sola organización.
Para ese entonces “Picure” tenía 19 años de edad y debutó en el mundo delictivo con el robo de vehículos de hacendados de Barbacoas, en Aragua, y El Sombrero, en Guárico.
La banda que lidera Tovar inició sus operaciones en el sector de El Sombrero en el estado Guárico, pero al repeler los operativos que los cuerpos de seguridad del Estado han realizado en contra de la agrupación, han expandido sus operaciones por el sur de Aragua, y desde inicios de 2015 en Distrito Capital, entre El Valle y La Vega.
“Picure” tiene conexiones con “pranes” de la Penitenciaría General de Venezuela, ubicada en Guárico, según un informe de inteligencia. Su banda está implicada al menos en una docena de homicidios de funcionarios de seguridad y en múltiples asesinatos de civiles.
La organización delictiva posee fusiles AR-15, FAL y M-16, escopetas, lanzagranadas, ametralladoras y pistolas con cacerinas de 32 cartuchos (“cocosete”).
En febrero de este año, para ese entonces viceministro de Política Interior, José Vicente Rangel Ávalos, dijo en una entrevista al portal Contrapunto que el gobierno ha negociado con “Picure” para que su banda se pacifique y que una de las condiciones que el criminal pide es casa por cárcel.
Antonio Bravo Sánchez
“Juvenal”
La megabanda liderada por Antonio Bravo Sánchez, alias “Juvenal” es el segundo grupo delictivo más numeroso, luego de la encabezada por su adversario “Picure”, pues se disputan territorios para cometer los mismos delitos en los estados Guárico y Aragua.
Informes realizados por funcionarios de inteligencia destacados en Aragua y Guárico a finales de junio implican a la banda al menos en 20 homicidios de personas que fueron secuestradas y no pagaron los montos que el grupo exigía para su liberación.
“Juvenal” ha ganado nombre en el mundo criminal por los casos que han trascendido relacionados con extorsiones, secuestros y homicidios, en su mayoría a productores agropecuarios, agricultores y comerciantes que no cancelan las vacunas que su organización les cobra.
El hermano de “Juvenal” y primer lugarteniente es conocido como “Johandry”. Ambos residen en el sector Memo, en la frontera entre Aragua y Guárico. En Valle de la Pascua vive Miguel, otro lugarteniente de la megabanda.
Otras víctimas de la organización, que tiene su centro de operaciones en las localidades de Memo y el Sombrero entre Aragua y Guárico, son temporadistas y transeúntes que no viven dentro de los límites del estado Guárico y que por motivos laborales se ven obligados a transitar por la Carretera Nacional que va desde Chaguaramas hasta Dos Caminos en el estado Guárico, informaron fuentes extraoficiales.
Carlos Luis Revete
“Coki”
La evasión de Carlos Luis Revete “Coki”, el 13 de julio cuando cuerpos de seguridad del Estado penetraron con la Operación Liberación del Pueblo desde las 4:00 am en la Cota 905 para desmantelar bandas delictivas y dar con él, por ser el cabecilla de una organización que tiene su nombre y que se desplaza por ese sector popular, El Cementerio y El Paraíso, aún es una información que no ha sido aclarada por las autoridades. ¿Cómo huyó este delincuente de su centro de operaciones?, ¿ le advirtieron funcionarios que iban por él?, son parte de las interrogantes.
“Coki” está en la mira de la policía desde 2010 por estar involucrado en homicidios cometidos en su lugar de residencia: El Cementerio. Este delincuente tiene orden de aprehensión del Tribunal 36° de Control de Caracas que data de agosto de 2013. Aparece mencionado en un expediente por el asesinato de Greiber Danilo Alonso Lucas, a quien mataron a tiros dentro de una vivienda el 26 de febrero de 2013.
La organización que representa Revete es una de las 41 bandas que operan en los 5 municipios de Caracas y es una de las 19 que están identificadas por actuar en Libertador. Anteriormente era conocida como “Los Chiches”. Este 2015 la banda ganó más renombre luego de que en el centro de operaciones los delincuentes, que hicieron un pacto de no agresión con sus pares de El Valle y la Cota 905, autodenominaron esos sectores como “zona de paz”.
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