Liquidan al asesino de una familia

Conocían su modus operandi. Los funcionarios lo avistaron en una calle de la zona. Le ordenaron quedarse quieto, pero ignoró la voz de alto. Huyó. Los efectivos lo persiguieron y lo alcanzaron unos metros más adelante

Ricardo Serrano/La Verdad

Pagó con su vida el asesinato de una familia. Edwar José Isea Ferrer (21), alias el «Mono», fue ultimado, el pasado jueves, en la avenida principal del sector Los Lirios, barrio José Antonio Páez del municipio Maracaibo.

La Dirección de Inteligencia y Estrategias Preventivas (Diep) de la Policía regional lo buscaba por su presunta implicación en el homicidio de tres miembros de una familia.

Conocían su modus operandi. Los funcionarios lo avistaron en una calle de la zona. Le ordenaron quedarse quieto, pero ignoró la voz de alto. Huyó. Los efectivos lo persiguieron y lo alcanzaron unos metros más adelante.

El «Mono» desenfundó su arma de fuego e intercambió disparos con los policías, pero estos repelieron las balas y lo hirieron gravemente. Luego lo trasladaron al CDI La Plateja, pero ingresó sin signos vitales.

Triple homicidio

A Isea Ferrer lo señalaban como el autor intelectual y material de las muertes de Alberto José Sulbarán Méndez (26), su esposa Sairí Ortega (21) y su hijo Cristian Sulbarán Ortega (4). Los acribilló en su casa, en el barrio El Hatillo, parroquia Venancio Pulgar, el 13 de agosto de 2015.

Unos golpes se escucharon ese día, a las 9.30 de la noche, en la puerta de su rancho. Yasmira Méndez, madre de Alberto, observó que alguien alumbraba con una linterna en medio de la oscuridad las afueras de la casa. Al amanecer, se topó con los cadáveres de su hijo y su familia. Vivía con ellos.

El delincuente poseía un largo prontuario por los delitos de extorsión, sicariato y cobro de vacuna. Antes de ser liquidado por la Policía, se encontraba bajo régimen de presentación en tribunales por robo agravado.