El sobrino de Marina, Jonaiker Fierro, era llevado al cementerio cuando se suscitó el vuelco e incendio de la buseta. Dijo que un auto le quitó la derecha al conductor de la unidad autobusera.
La tragedia vial registrada al amanecer de este domingo 22-N enluta al estado Falcón. Ocho personas murieron cuando iban al sepelio de un hombre cuyos restos fueron repatriados desde Colombia.
En el portal de Nuevo Día se informa que a las 11:00 de la noche del sábado fue traído el cuerpo de Jonaiker Fierro a la casa de sus familiares en el sector San José, en Coro, municipio Miranda.
Dijeron que «en vista de que el cuerpo comenzaba a descomponerse debido al largo viaje desde Colombia, y los días que duró en ser trasladado a Coro, decidieron llevarlo a su última morada este domingo.
El ataúd fue montado en el carro fúnebre y detrás una buseta de la línea América Libre con un grueso número de personas». Sin embargo, en el trayecto al camposanto el carro fúnebre presentó un desperfecto mecánico que le impidió seguir. Ahí familiares decidieron hacer trasbordo y llevar el ataúd en la buseta.
Marina, tía de Jonaiker, era una de las personas que acompañaba el sepelio. Contó a Nuevo Día que no sabe cómo logró sobrevivir al accidente. «Comencé a orar, pidiéndole a Dios que nada nos sucediera», tras sentir el movimiento violento de la buseta en la carretera.
Describió que logró salir de la buseta por una de las ventanillas y gritó pidiendo auxilio. Asegura que un auto les quitó la derecha al conductor de la buseta y luego este perdió el control de la unidad originándose la tragedia.
De acuerdo con Notifalcón, las víctimas mortales de este hecho quedaron identificadas como: Yoarlis, Pedro Fierro, Álida del Carmen Cariel, Sandra, Gabriel López, María Fernanda González López, Mariángela y Gustavo López.