Un grupo de jóvenes se encontraba limpiando un terreno baldío para practicar deportes cuando se toparon con una bolsa de leche enterrada a pocos metros, su sorpresa fue mayor al percatarse que en el interior reposaban numerosos huesos.
El hallazgo tuvo lugar en el sector La Blanca, municipio Rómulo Gallegos del estado Cojedes. Los jóvenes intentaron armar el esqueleto y, al tener la mayoría de las piezas en su lugar, se dieron cuenta que se trataban de huesos humanos correspondientes a un bebé.
Una comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) acudieron al lugar a fin de colectar todas las evidencias, que permitan identificar a los responsables de este hecho. Hasta el momento, según reseñó Últimas Noticias en su página web, las autoridades desconocen si la osamenta pertenece a un neonato o a un niño, considerando lo pequeño de los huesos encontrados.