Eunice Vargas, la esposa de Richard Marín, profesor de natación acusado por presunto abuso sexual contra un alumno del colegio Emil Friedman, ubicado en Caracas, rompió el silencio. Denunció las irregularidades que rondan esta investigación y mantienen privado de libertad a su pareja desde hace más de 100 días.
A través de su canal en Youtube, la mujer compartió un video con sus declaraciones en las que asegura que Marín “está preso por una oscura tramoya de la cual son partícipes los más oscuros intereses y es cómplice el sistema judicial”.
Ante los diferimientos de la audiencia preliminar por este caso, explicó que “pareciera que en Venezuela cuando se quiere castigar a un inocente aunque no existan elementos reales para culparlo, el método es el indefinido diferimiento de las audiencias”.
Respecto a las investigaciones, la también docente señaló que el principal elemento para formular las acusaciones contra su esposo fue la presencia de cinco manchas de semen en el bóxer de un niño de seis años. Aseguró que los investigadores le preguntaron a Marín si se sometería a las pruebas de ADN y este “sin titubear” contestó que sí.
Según ella los resultados arrojaron negativos; sin embargo, las autoridades determinaron que esta prueba fue descartada por considerarla insuficiente para obtener alguna conclusión. Esto, dejó a Marín “en un limbo y cierra las posibilidades de encontrar al verdadero culpable”, detalló.
Consideró que descartar la prueba en lugar de aumentar la presunción de inocencia, lo que hizo fue disminuirla.
Para ella, ésta no es la única irregularidad presente en el caso Emil Friedman. Criticó que en el momento que se presentaron las pruebas anticipadas con dos niños de ese colegio, no se permitió la presencia de un consultor jurídico por parte de la defensa como lo establece la ley. Además la secretaria del tribunal a cargo del caso, María Gabriela Orozco, le dijo a Marín delante de la juez que iría a la cárcel, donde sería violado y asesinado.
Sentenció que “el énfasis es el de conseguir un culpable a como de lugar, utilizando el poder del Estado y de la Fiscalía en vez de encontrar al verdadero culpable. No es lo mismo conseguir a un culpable que al verdadero culpable.
por CD en noticiasaldiayalahora.co