El pasado 26 de septiembre inició el año escolar 2016-2017 en el colegio Emil Friedman del municipio Baruta, institución que el 30 de junio se vio envuelta en un escándalo de presunto abuso sexual, sin embargo, el regreso a las aulas estuvo caracterizado por la normalidad, la implementación de nuevas medidas de seguridad y la incorporación de una nueva instructora de natación.
Han pasado casi 100 días desde que una comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), detuvo a los profesores Richard Oswaldo Marín Torres (47) y Juan José Carrillo Palacio (41), por su presunta responsabilidad en el abuso sexual contra estudiantes de primaria. Por el caso solo Marín se mantiene privado de libertad, debido a que la Sala 7 de la Corte de Apelaciones del Área Metropolitana de Caracas otorgó libertad plena a Carrillo.
Una representante que pidió mantener su nombre en resguardo indicó a Caraota Digitalque la afluencia de alumnos en el colegio sigue siendo la misma a la registrada antes del escándalo judicial. “Nada ha cambiado. Seguimos esperando que las autoridades y los tribunales terminen de investigar el caso. Como todo, hay opiniones encontradas, pero eso no ha afectado la reputación de la institución”, dijo.
Al ser consultada por el temor que puede haber entre los padres al dejar a sus hijos solos con los profesores, reveló que la Junta Directiva está tomando medidas de seguridad que previamente fueron notificadas a los representantes para su tranquilidad, las cuales consisten en la contratación de una empresa de seguridad, el acompañamiento de los alumnos a través de auxiliares, la necesaria autorización para ingresar al plantel y la obligatoriedad del uso del uniforme en los profesores.
Asimismo, se pudo conocer que tras la salida de Marín y Carrillo, la institución contrató a una nueva profesora para que junto a un docente que ya tiene al menos cinco años en el colegio impartan las clases de natación.