El padre de Ashly Ways, la tiktoker de 16 años detenida en Yaracuy el pasado lunes 24 de febrero por la Policía Nacional Bolivariana (PNB) bajo cargos de incitación al odio, utilizó las redes sociales para pedir clemencia y una revisión del trato que recibe su hija en prisión.
La joven fue arrestada por burlarse en un video de la muerte de la madre de Karlenys Arocha, otra tiktoker, quien había fallecido de cáncer.
Por medio de un material audiovisual, el padre de Ashly comenzó su mensaje expresando su desacuerdo con las declaraciones de su hija, calificando su comportamiento como una “grosería”, pero insistió en que no fue un acto criminal grave.
“Yo no veo un delito feo, de crueldad, veo una grosería”, señaló, añadiendo que su hija no merece el trato que está recibiendo dentro de la cárcel. Según él, fue confinada en el piso de la celda y ha recibido amenazas de muerte, lo que ha afectado emocionalmente a su familia.
Pidió una audiencia con el fiscal general, Tarek William Saab, para hablar “como padre” y buscar una solución justa. Además, dirigió un mensaje a Karlenys Arocha, la tiktoker afectada, pidiéndole que perdonara a la menor de edad.
“Karlenis, discúlpela; usted es mayor y entiendo que también es madre, ayude a salvar a mi hija, no hagamos que esto termine mal con mi hija”, dijo.
El ciudadano asumió la responsabilidad por haberle regalado el teléfono móvil a su hija, considerándose el principal culpable de lo sucedido.
En el contenido que desató la polémica, aparece Ashly sonriente, burlándose del fallecimiento de la madre de Arocha, mientras aseguraba que “mejor hubieras estado pendiente de tu mamá que estaba a punto de morirse”. “Las personas nacieron para morirse”.
El clip, que rápidamente se viralizó, fue la causa principal de la investigación por parte del Ministerio Público, que imputó a Ashly por los delitos de incitación al odio.