Un motín en el Centro de Coordinación Policial de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), antigua zona 7, de Boleíta, Miranda, fue el inicio de una exigencia por parte de los detenidos por el hacinamiento en el lugar, también de dos muertes dantescas y una escaramuza entre familiares y uniformados a las afueras del recinto de detención.
El martes alrededor de las 7:45 de la noche comenzaron a conocerse los reportes de un levantamiento por parte de los detenidos del centro de reclusión.
Los presos quemaron colchonetas y rompieron los candados de tres celdas, todo para exigir traslados por el hacinamiento en el lugar y rechazar el ingreso de un detenido acusado de violación.
En ese momento los privados de libertad decapitaron a un detenido y asesinaron a otro también, quienes fueron identificados como Javier Román Castillo y Erick José Gastón, de 24 años, detenido por hurto.
De forma extraoficial se logró obtener un video, donde se detalló cuando los presos pisaron el cuerpo del recluso decapitado y entonaron el Himno Nacional.
Un segundo día
El motín se extendió hasta este miércoles cuando los reclusos colocaron barricadas, con rejas, que destrozaron, y otros objetos, en la entrada hacia los calabozos del centro de reclusión para impedir el ingreso de uniformados.
A las afueras del centro de reclusión el escenario era otro. Alrededor de las 08:00 de la mañana familiares de los detenidos se congregaron en el lugar para conocer el estado de los presos, mientras que un contingente de la PNB, con equipos antimotines, se apostó en el sitio para bloquear los accesos.
A varios de los familiares se les observó alarmados por la situación, entre ellos los parientes del fallecido Erick Gastón, quienes repudiaban la forma como lo asesinaron y una de sus familiares llegó a desmayarse.
La situación se tornó tensa cuando llegó al sitio un contingente de la Dirección de Investigaciones Penales (DIP) de la PNB. Los funcionarios en un principio intentaron ingresar, pero los familiares se los impidieron, luego buscaron entrar al recinto carcelario nuevamente y se inició una escaramuza entre los parientes y los uniformados.
Los familiares impedían el ingreso de los funcionarios, haciendo una cadena humana, sin embargo, terminaron entrando a las instalaciones del Centro de Coordinación Policial.
Al centro de detención también ingresaron funcionarios de la Guardia del Pueblo, del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), fiscales del Ministerio Público, entre otros funcionarios del Gobierno.
Los traslados
Luego de unas horas un funcionario de la PNB de apellido García, quien era uno de los mediadores, les informó a los familiares de los detenidos que les iban a dejar ingresar agua a los presos que estaban atrincherados.
Los familiares recopilaron varios envases de agua para que los ingresaran al comando policial, mientras que esperaban que acataran las demás exigencias de los presos como: traslados masivos, traslados de los heridos y enfermos y la presencia de la ministra del Servicio Penitenciario, Iris Varela.
“La situación en ese lugar es horrible, la insalubridad, muchos tienen que dormir parados, tienen tuberculosis, nacidos en el cuerpo, para todo tienes que pagar, hasta en dólares. Existe un lugar que le llaman el inframundo, que es un infierno”, contó a El Cooperante Isneidi Castro, familiar de uno de los detenidos.
Luego de 18 horas del motín más de cuatro unidades policiales salieron del recinto con detenidos, que serán trasladados a otros penales, reseñó Lysaura Fuentes/ElCooperante
LAS IMÁGENES:
https://youtu.be/iRZlvH9py6c