‘El Dimita’ sembró pánico y muerte en Los Puertos

El eco incesante de las balas sembró terror y muerte en el municipio Miranda. A las 11:15 de la noche del pasado jueves, un sicario, portando un arma larga, irrumpió en una residencia del sector Pueblo Nuevo, en la Costa Oriental del Lago, y disparó en contra un grupo de unas  20 personas que se encontraban bebiendo.

El   ataque, que duró por poco más de un minuto, terminó con dos amigos muertos y cuatro heridos.
Carlos Daniel Raga, de 16 años; e Irvin Ricardo Zambrano Isea, de 33, no pudieron escapar de la muerte y fueron alcanzados por los proyectiles de un temible  sicario señalado por las autoridades policiales como “El Dimita”.

Según voceros ligados a la investigación, el criminal  llegó al sitio en una moto y acabó con el compartir de amigos  escasos 10 minutos después que fuera reestablecido el servicio eléctrico en la zona.

Los vecinos del sector escucharon, al menos, 60 detonaciones.

El licor ya se había terminado y cada uno de los presentes se disponía a retirarse del lugar, cuando “El Dimita” ingresó a la residencia, caminó hasta el patio de la casa y  tomó por sorpresa al numeroso grupo.

“Todo fue terrible. Llegó de la nada y disparó a diestra y siniestra. Carlos recibió un tiro en la cabeza mientras manipulaba el teléfono.  Irvin intentó correr como, pero dos tiros le perforaron el intercostal izquierdo”, recordó un testigo, quien prefirió omitir su nombre.

Irvin murió en el sitio debido a la gravedad de las heridas, mientras que el menor falleció la madrugada de ayer en el Hospital General del Sur, de Maracaibo, a donde fue trasladado.

Los heridos del ataque son: Franklin Piña, de 28 años;  Rainel Caldera, de 28 años; Alfredo del Moral, de 28, y  Enzo Bohórquez. Todos permanecen en un centro de salud de la capital zuliana.

Funcionarios de la policía científica acudieron al sitio donde se registró el doble homicidio a recolectar evidencias de interés criminalístico y avanzar con las investigaciones.

El móvil que manejan es el de la venganza. Presuntamente, un delincuente del barrio contrató al sicario para que perpetrara el ataque en contra de Zambrano, a quien hace algunos años le mataron a un hermano.
El adolescente fallecido era el menor de dos hermanos y no estaba estudiando; mientras que Zambrano prestaba servicio para una contratista.

 

A. Estrada / J. Rivero/Panorama