Tras el asesinato de Saylubis Nayrud Betancourt Crespo, de 19 años, perpetrado por la noche del martes, 28 de julio en la avenida principal de la Urb. San Antonio de La Floresta al oeste de Valera, donde además resultó gravemente herido el mototaxista Keyver Alexander Godoy Durán, de 32 años, un equipo de alto nivel del Eje de Investigación de Homicidios del Cicpc examinan los hechos para dar con los responsables.
Un alto vocero detectivesco señaló que por ahora no hay pistas de los matones. Las evidencias del crimen están bajo revisión pericial. El portavoz policial señaló que los círculos íntimos de los jóvenes están bajo lupa, para esclarecer los hechos, y establecer la verdad detrás del mortal ataque a tiros, donde usaron una pistola calibre punto 40 para ejecutar el encargo, aunque aún no está claro con quién era el problema.
Los pesquisas colocan sobre la mesa la tesis de lío pasional o venganza por razón a determinar, sin embargo, nada está claro ni nada es definitivo. Las investigaciones podrían dar un vuelco en cualquier momento, aunque en este caso, es prematuro establecer un giro. Por ahora están esas dos hipótesis en estudio, en comparación con testimonios. Los familiares de los jóvenes rinden declaraciones.
El motorizado, único testigo directo del ataque armado aún se encuentra en estado crítico. Lucha por su vida en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Central de Valera. El joven tiene impactos de bala en la cabeza, el pecho y las piernas. Los detectives lidian con unos vecinos adyacentes a la escena del crimen que parecen ser “ciegos, sordos y mudos”; nadie vio ni escuchó aquella bestial ráfaga de disparos.
(Diario de Los Andes)