Siete vivienda y un PDVAL fueron destruidos por las llamas en la Cota 905, durante un enfrentamiento ocurrido la tarde-noche del viernes pasado, entre presuntos pandilleros y efectivos policiales, que regresaron al cerro con orden de darle protección a la comunidad.
El tiroteo tuvo su inicio el miércoles pasado, cuando las autoridades abatieron a 6 residentes en esos barrios, sindicados por las autoridades en distintos delitos, pero en la balacera también fue ultimado el comisionado de la Policía Nacional Bolivariana Jorge Joves García, que recibió un impacto de bala en la frente.
Para sacar del sector a los bandoleros, el viernes en la tarde regresaron las autoridades a la 905 y recrudeció la refriega. De pronto una de las viviendas fue arrasada por un incendio. Las llamas se propagaron hacia seis inmuebles más y a las instalaciones del mercado donde se abastecía la comunidad el cual también fue pasto de las llamas.
Hasta la tarde del sábado los jefes policiales no habían aportado detalle de este nuevo enfrentamiento.
(ÚN)