Cuando sometían a la víctima dentro del vehículo este logró zafarse y bajarse del mismo, por lo que corrió hasta la delegación buscando ayuda. En el auto quedaron los zapatos y sus documentos personales. Los funcionarios intentaron huir al ver la comisión
Los gritos de auxilio sorprendieron a los funcionarios de la Policía científica en la subdelegación Paraíso en Caracas. Mauro Alexánder Moreno Berbesi corría descalzo y asustado hacia la delegación. Alegaba que había sido secuestrado por funcionarios de la Guardia Nacional, adscritos al Comando Antiextorsión y Secuestro (Conas). Le exigían dos millones 500 mil bolívares a cambio de su vida.
Jéssica Nathaly Guaparumo Molina, primer teniente; Jhon Jairo Velásquez Cortés, sargento segundo; Sergio David Sánchez Pinto, sargento primero, y Karla Johanaly Méndez Sandoval, abogada adscrita al Ministerio Público, habrían secuestrado al hombre en una camioneta Jeep Cherokee, placa AB637GK, la mañana del domingo en la avenida principal El Paraíso, Distrito Capital.
Cuando sometían a la víctima dentro del vehículo este logró zafarse y bajarse del mismo, por lo que corrió hasta la delegación buscando ayuda. En el auto quedaron los zapatos y sus documentos personales. Los funcionarios intentaron huir al ver la comisión.
Los detectives los interceptaron y los detuvieron. Todos vestían de civil con chalecos antibalas alusivos al organismo.
Interrogaron a los involucrados para esclarecer lo sucedido. La víctima que presuntamente está involucrada en la venta de sustancias psicotrópicas y estupefacientes dijo que los militares lo habían secuestrado minutos antes.
«Si no cancelaba la cantidad exigida lo iban a asesinar y lanzar a un matorral», informó un oficial. Los victimarios luego de horas de interrogatorio confesaron el delito. Los militares quedaron bajo resguardo policial y a disposición del Ministerio Público.
Criminales uniformados
El propietario de una distribuidora en Táchira fue secuestrado el pasado 27 de julio por tres guardias adscritos al Conas, identificados como Aldo Alejandro Gutiérrez Prado, Wílliam Benito Silva Montiel y Rodolfo Deymar Carrero Rojas, todos tenientes.
Los familiares de la víctima denunciaron lo ocurrido y en una entrega controlada la Brigada de Contrainteligencia Militar 33 del estado realizó la detención de los uniformados.