Conoce paso a paso el caso del Colegio Emil Friedman

colegio-emil-friedman-de-caracas

Este jueves trascendió que el profesor Richard Marín Torres del Colegio Emil Friedman acusado de violación de varios niños fue sentenciado a 30 años de prisión.

Todo había comenzado cuando tres niños del colegio Emil Friedman comenzaron a presentar un comportamiento distinto y de rechazo tanto al colegio como a las clases de natación.El 30 de junio de 2016 el Cuerpo de Investigación Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) recibió una denuncia que lo llevó a detener a los profesores de natación Richard Marín y Juan Carrillo, del colegio Emil Friedman, ubicado en Los Campitos.

Cuando se conoció el caso, hubo mucha controversia porque algunas madres, padres, docentes y representantes defendían al profesor Richard Marín Torres, que resultó acusado, mientras que otros padres y docentes lo acusaban. El profesor Juan Carrillo quedó en libertad. Desde el inicio un equipo de investigación de Noticias 24 asumió el caso y llevó a cabo varios trabajos que permitieron a los lectores tener mayor conocimiento los hechos.

El Ministerio Público inició la investigación. Las denuncias fueron progresivas, denunció el padre de un niño de seis años, luego uno de siete y el tercero fue de cinco años. El abuso sexual infantil fue claro de acuerdo con el Ministerio Público. Los niños expresaron con detalles lo que les hacía el profesor de natación para castigarlos cuando hablaban.

Los testimonios

Noticias24 presentó el testimonio de los padres de uno de los niños ante la opinión pública. En las declaraciones ofrecidas ante los cuerpos policiales por el denominado Niño 1, de seis años, fue revelado lo siguiente: “Cuando estamos en la clase de natación el profesor, cuando yo hablo mucho me dice ve al baño, y entonces él se mete en el baño, se baja sus pantalones y me mete su pipí en mi pompi…”

A su vez, el Niño 2, de siete años, en su declaración comentó: “Cuando estamos en el baño, el profesor Richard me baja el short, y me mete un palito por mi culito y me dice: ‘no le digan nada a sus madres que yo les toco su pipí y que les toco sus nalgas’.”

El Niño 3, de cinco años, en su relato para las autoridades manifestó que el profesor Marín “le metía el pipí en el culito y se hacía pipí”, situación que le causaba dolor. Estos eventos fueron mencionados por el mismo Niño 3 como el “juego de los pipís mojados”, situación que además reitera las declaraciones de las otras dos víctimas.

Protección para las víctimas

El Ministerio Público solicitó medidas de protección intraproceso, mediante las cuales requirió la preservación de las identidades de los niños que fueron víctimas de abuso sexual, caso por el que fue acusado el profesor de natación del Colegio Emil Friedman en Caracas, Richard Marín.

Tal requerimiento se hizo ante la Unidad de Recepción y Distribución de Documentos del Circuito Judicial Penal de Caracas, tras la divulgación, a través de distintos medios de comunicación social, de transcripciones de actas y demás elementos de convicción en los cuales se sustentó la respectiva acusación.

Con esta acción legal, el Ministerio Público defiende el derecho al honor, reputación, vida privada e intimidad familiar de las víctimas.

De esta manera, la institución garante de la legalidad en el país cumple con el artículo 65 de la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (Lopnna); los numerales 1 y 2 del artículo 23 de la Ley de Protección de Víctimas, Testigos y demás Sujetos Procesales, y los artículos 8 y 16 de la Convención de los Derechos del Niño.

El Ministerio Público acata la normativa procesal y el criterio vinculante de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, la cual estableció los medios idóneos para asegurar que las declaraciones de los niños fueran preservadas en su esencia primigenia, mediante la toma de la prueba anticipada.

Es importante recordar que en consecuencia, el Ministerio Público solicitó dos días después las respectivas órdenes de aprehensión contra Marín y otro docente del plantel, Juan Carrillo Palacios, las cuales fueron materializadas el mismo 30 de junio.

Entretanto, el 4 de julio, Marín fue imputado por abuso sexual a niño agravado y continuado en perjuicio de dos niños de seis y siete años. Carrillo resultó imputado como cómplice.

Hoy, el caso fue decidido y el profesor Marín fue sentenciado a 30 años de prisión.