El cuerpo de Luis Alfredo Garavito Cubillos, el violador y asesino de casi 200 niños en Colombia, Ecuador y Venezuela, se convierte en un problema de salud pública para Valledupar.
El cadáver permanece en una nevera intermedia del Instituto Nacional de Medicina Legal de Valledupar desde hace 12 días, donde -según entendidos en la materia- no se garantizaría una temperatura fría constante.
“Está causando molestia a los funcionarios de Medicina Legal. Aunque está en una nevera intermedia, la temperatura fría no es duradera. Enviamos a un delegado de la Personería para que verifique la situación”, explicó Silvio Cuello, procurador de Valledupar.
El asesino serial falleció el 12 de octubre en la Clínica Santo Tomás de Valledupar. Para la cremación del cuerpo la familia ha venido cumpliendo una serie de trámites reglamentarios con las autoridades pertinentes.
Hasta la fecha, la Fiscalía seccional Cesar no ha entregado el cuerpo del fallecido a la espera de la verificación del registro civil, que entregó un sobrino de Garavito, por parte de la policía judicial de Génova (Quindío), lugar donde nació el asesino serial.
“El sobrino de Garavito llegó a Valledupar el lunes feriado. Aportó el registro de civil de Luis Alfredo, al igual que el de su hermana Esther Garavito Cubillos, cédulas correspondientes. El documento no estaba muy claro, pero se podía evidenciar que era el registro civil de Garavito”, explicó Gabriel Alfonso Beltrán, abogado de Garavito.
“Es un rumor que llegó a la familia, están preocupados porque pasan los días y no entregan el cuerpo de Garavito. Las directivas de la Cárcel de Alta y Mediana Seguridad de Valledupar, donde estaba recluido, tampoco han entregado las pertenencias de Luis Alfredo”, recalcó una persona cercana a la familia de Garavito.
La cremación del cadáver estaba prevista desde el 18 de octubre en el parque Cementerio Jardines del Recuerdo de esta localidad. El sobrino de Garavito, quien llegó a Valledupar para el desarrollo de este procedimiento, se marchó de la ciudad sin las cenizas del condenado.
En virtud de lo anterior, la familia entregó un poder al secretario de gobierno municipal, Felipe Murgas, para que reciba el cuerpo de Luis Alfredo Garavito Cubillos. Solicitó que corrobore que efectivamente corresponda a su cuerpo, porque después de cremado no podrán identificarlo.
“Desde la alcaldía hemos venido apoyando este proceso de la mano de la Defensoría y Personería. De hecho, el mandatario pagó de su propio bolsillo 2.700.000 pesos para la cremación del cuerpo porque el convenio que tiene el municipio con la Diócesis de Valledupar no contempla este gasto. Estamos a la espera de que la Fiscalía nos entregue el cuerpo para proceder a la cremación”, dijo un funcionario de la Alcaldía de Valledupar. El Tiempo