El pasado miércoles 9 de octubre en horas de la noche fue asesinado un comerciante en la ciudad de Mérida, el joven fue identificado como Jonás Durán de 22 años, se conoció que el hecho lo perpetró un sujeto con intenciones de atracarlo dentro de su establecimiento comercial.
La versión extraoficial explica que la víctima estaba en su bodega ubicada en el sector Campo de Oro del municipio Libertador, cuando un antisocial ingresó al negocio para atracar y quitarle la vida cuando el joven supuestamente se opuso, otra versión indica que presuntamente el atracador exigía la entrega de dólares, según reseña Caraota Digital
Hasta el momento no hay información oficial por parte de los cuerpos de seguridad del Estado que aclaren este crimen que ha generado conmoción entre los habitantes del sector, porque era muy apreciado en el muncipio.
Por su parte el padre Edduard Molina, párroco de la iglesia Santiago de la Punta en Mérida, emitió un conmovedor comunicado ante la opinión pública:
Querido Jonás
La historia bíblica relata que Jonás fue tragado por una enorme ballena y arrojado en la otra orilla del mar, lugar en el que Dios le tenía una nueva misión a este profeta de la esperanza.
Hoy queremos creer, en medio del profundo dolor y la impotencia de tu injusta e inhumana muerte, que tu has sido devorado por la enorme ballena de la muerte, en medio de este tempestuoso mar de violencia, insensatez y miseria humana en la que se ha convertido Venezuela.
Queremos creer que al igual que el profeta Jonás has sido arrojado en la otra orilla del país de la vida, allí donde no hay luto, ni enfermedad, ni dolor, sino alegría y esperanza eternas.
Gracias por dejar una huella imborrable y gigante de verdadero joven surmerideño, que pese a su corta edad, tenías el coraje, la valentía y la constancia de asumir los retos de la vida con la mayor ilusión y compromiso.
Gracias por enseñarnos que pese a la tragedia de tantos jóvenes como tú que se ven obligados a marchar del país, tú optaste por quedarte y aportar tu granito de arena con tu honesto trabajo, estudio y dedicación a tu pequeño hogar.
Queremos creer en las palabras del libro de la sabiduría: «porque su alma era tan buena y tan pura, Dios quiso arrebatarlo de este mundo para que la perfidia no lo contaminara»… alma pura, sangre noble de mi Canaguá, de la gran escuela de familia de don Braulio y María Durán, descansa en paz, continúa tu nueva misión que hoy Dios te encomienda en el cielo: cuidar e interceder por tantos jóvenes caminantes sin rumbo ni horizontes en busca de sentido en sus vidas y gracias por convertirte en un Santo mártir Canagüense que hoy ilumina nuestro amado terruño.
Mucha fortaleza y consuelo en el espíritu querida familia. Todos unidos en oración por ustedes.
Dios les bendiga
Su amigo
Padre Edduard…