El caso se investiga como una disputa por tierras. Sus conocidos comentaron que tenía problemas, pero no detallaron con quién por temor
El camión 350 Súper Duty gris, placa A28CK2A, se estacionó ayer, a las 12.30 del mediodía, frente a la Arepería y Pastelería Belén. Félix Becerra Pérez, productor agropecuario de 34 años, abrió la puerta del conductor, se bajó y caminó hasta el mesón derecho del establecimiento. Llamó la atención del encargado con la mano, le ordenó un refresco y se sentó a esperar.
Según los testigos, manipuló sus teléfonos. En una sorbida se bebió la mitad de su refresco. Montó su pie derecho entre las rejas celestes debajo de la mesa de madera y dijo que esperaría a su hermano para ordenar el almuerzo.
No habían transcurrido 10 minutos en el establecimiento cuando dos muchachos descendieron de una motocicleta, velozmente disparon seis veces contra Becerra y huyeron.
El comensal, de estatura promedio y robusto, cayó hacia el lado derecho de su silla, golpeó su cabeza contra el piso rojo y agonizó frente al mesero y el administrador. Ninguno se atrevió a ayudarlo.
Al muerto lo cubrieron con un trapo celeste, el administrador llamó por teléfono a la comandancia y esperaron unos 20 minutos para que llegara la patrulla.
Por la rapidez, comentó uno de los testigos a los oficiales de la Policía regional, ninguno pudo detallar el rostro de los homicidas ni las características del vehículo en el que se desplazaban.
Un pariente de Becerra llegó al restaurante, le confirmó la identidad a los oficiales y esperó a un costado del establecimiento hasta que los detectives de la Policía científica inspeccionaran la escena, recogieran los seis casquillos de bala del piso, tomaran como evidencias algunas pertenencias del agroproductor y trasladaran el cadáver a la morgue del Hospital General de Santa Bárbara.
A la víctima le contabilizaron solo tres heridas de bala, entre la cabeza y la espalda. Los investigadores presumen que el hombre nunca vio a sus atacantes y no pudo defenderse. Hasta ahora no tienen un móvil concreto del crimen. Entrevistan a sus parientes e investigan su círculo de amistades para descartar hipótesis.
Unos conocidos de Becerra comentaron que a su amigo lo mataron por problemas de tierras. No quisieron dar detalles para no comprometerse.
Jéssika Ferrer Palma/La Verdad