Seis malos hábitos que acortan tu vida

Científicos señalan factores que aumentan el riesgo de muerte prematura

Científicos de la Universidad de Sidney aseguran que más de la mitad de las muertes del mundo pueden atribuirse a comportamientos o estilos de vida poco saludables. Entre ellos mencionan:

  1. Fumar.Con más de 19 químicos carcinogénicos conocidos y un centenar de sustancias incompatibles con el organismo, el cigarrillo o exponerse al humo de los demás, es responsable directo e indirecto de cerca de seis millones de muertes al año. Entre los cánceres que causa están el de pulmón, boca, laringe y esófago, además del de vejiga, riñón, páncreas y cuello uterino. También es un detonante de graves problemas cardiovasculares.
  2. Dieta poco saludable.La excesiva carga calórica, representada en carbohidratos, bebidas azucaradas, grasas saturadas y bajo consumo de verduras y frutas, es responsable del aumento de sobrepeso y la obesidad. Este factor está ligado al incremento del síndrome metabólico que desencadena alteraciones cardiocerebrovasculares como  infartos, derrames y trombosis cerebrales.
  3. Tener muy poca actividad física.Esto repercute de manera directa en el organismo. El aumento de peso, la mala relación entre las estructuras del cuerpo, la falta de acondicionamiento y el síndrome por desuso no solo afectan huesos y músculos, sino que progresivamente comprometen el metabolismo de grasas y carbohidratos y el funcionamiento de vasos sanguíneos, corazón y pulmones, que enferman y pueden poner en serio peligro la vida.
  4. Tomar en exceso.De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año se producen 3.3 millones de muertes por el consumo nocivo de alcohol. Además,  su uso excesivo es un factor causal de más de 200 enfermedades y trastornos. El grupo de edad más afectado, en todos los casos, es el de 20 a 39 años.
  5. Pasar horas sentado.El sedentarismo, de acuerdo con la OMS, está relacionado con el 6% de todas las muertes del planeta, al punto que este organismo lo ha calificado como el cuarto factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades no transmisibles.  El acumulo de calorías, los altos niveles de colesterol, la obstrucción arterial, el aumento de la presión sanguínea y el riesgo de sufrir alteraciones cardiovasculares están ligados a este factor, que también desemboca en debilidad ósea, pérdida de masa muscular y disminución de la capacidad respiratoria.
  6. Dormir mal. La falta de sueño o dormir en exceso tiene serias implicaciones en el funcionamiento general del organismo. El agotamiento físico, el bajo rendimiento, las alteraciones emocionales y el aumento del estrés con impacto, sobre todos los sistemas del cuerpo, son apenas algunas de las consecuencias.

 

El Tiempo