Existen diferentes alternativas de medicamentos antirretrovirales para reducir el riesgo de contraer la enfermedad en personas no infectadas que tienen riesgo de exposición al virus. Los detalles de la Profilaxis Preexposición que se aplica cada dos meses
Por Valeria Chavez/INFOBAE
La profilaxis preexposición (PrEP) es un medicamento que se toma para reducir las posibilidades de contraer la infección por VIH. La PrEP es usada por personas que no tienen VIH pero que corren el riesgo de exponerse al contagio a través del sexo o el uso de drogas inyectables.
Las últimas novedades en esta herramienta terapéutica y las diferentes opciones disponibles fue uno de los temas que se abordaron en el XXI Simposio Científico de Fundación Huésped, que tuvo lugar en la Ciudad de Buenos Aires la semana pasada.
Por primera vez, el Simposio fue de carácter regional y contó con un comité científico conformado por referentes de distintos países de América Latina. A lo largo de tres jornadas, investigadores, referentes de la sociedad civil y profesionales de la salud, presentaron las últimas novedades y avances en VIH, enfermedades transmisibles, vacunas y salud sexual y reproductiva.
Qué es la PrEP de acción prolongada y cuáles son sus pros y contras frente a la oral
Se trata de una estrategia de prevención del VIH destinada a que personas no infectadas tomen medicamentos antirretrovirales para reducir significativamente el riesgo de adquirir el virus.
Actualmente, existen dos formulaciones aprobadas para la PrEP: la PrEP oral, basada en la combinación de tenofovir disoproxil fumarato (TDF) y emtricitabina (FTC), que se toma diariamente o en un régimen intermitente según el patrón de exposición.
Por otro lado, de más reciente aprobación, la PrEP inyectable de acción prolongada, que utiliza cabotegravir (CAB-LA) y se administra mediante una inyección intramuscular cada dos meses. Ambas estrategias demostraron ser altamente efectivas en la prevención del VIH según los estudios HPTN084 y HPTN083, del que Fundación Huésped formó parte.
Consultado por Infobae acerca de cuáles son los principales desafíos que enfrenta este tipo de estrategia de prevención en América Latina, el médico infectólogo y director científico de Fundación Huésped, Pedro Cahn, consideró que “los principales desafíos que presenta la implementación de la PrEP de larga duración son de dos tipos, los costos eventuales que pueden tener y la logística”.
“Lo que tenemos hasta ahora como PrEP de larga duración es cabotegravir, que se da cada dos meses. Esto implica tener espacios para dar esas inyecciones de las personas que van a participar en estos programas de PrEP”, señaló el experto, quien añadió: “Además, la logística representa otro desafío importante, ya que la administración aprobada requiere inyecciones cada dos meses”, que el paciente debe recibir en tiempo y forma.
Y tras reconocer que “el acceso generalizado a esta opción dependerá, en gran medida, del costo y de la disponibilidad de recursos en cada país”, entre los puntos a favor, Cahn señaló que “la PrEP inyectable tiene la ventaja de no depender de la toma diaria, lo que puede mejorar la adherencia al tratamiento”.
“Solamente debe garantizarse que la persona concurra a inyectarse -sostuvo-. Además, la PrEP inyectable permite la ventaja de la privacidad, el hecho de recibir la inyección cada dos meses por ahora, y posiblemente cada seis meses en el futuro”.
Qué es lo que viene, en PrEP
Los resultados del estudio HPTN 083 sobre el uso de cabotegravir son de 2020, mientras que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por su sigla en inglés) autorizó esta opción terapéutica a fin de 2021.
En tanto, están en marcha los estudios PURPOSE 1 y 2 que investigan el uso de lenacapavir como PrEP cada seis meses.
“Recientemente, en la Conferencia Mundial de Sida en Alemania, se presentaron los resultados del estudio PURPOSE 1 que busca probar la eficacia del lenacapavir para PrEP en mujeres cis género en África, que obtuvo cero casos de trasmisión en la rama de estudio”, precisó Cahn a este medio.
En simultáneo, “está en marcha, y Fundación Huésped es uno de los centros donde se desarrolla el estudio, el PURPOSE 2 busca probar la eficacia en hombres que tienen sexo con hombres y mujeres trans”.
“Esperamos tener novedades para finales de este año”, destacó el experto, para quien “de aprobarse el lenacapavir, generará menor carga laboral, ya que los servicios de infectología están muy sobrecargados”, agregó.
En términos de cómo garantizar el acceso, en la mirada de Cahn, “depende mucho de la negociación por los precios y las eventuales transferencias de tecnologías que puedan acordarse entre los laboratorios productores y distintos mecanismos, como el Medicine Patent Pool”.
Y, finalmente, para él, “para garantizar un acceso más equitativo, se requiere una acción política de parte de las comunidades afectadas, presionando a los gobiernos para que efectivamente negocien de una manera más potente y efectiva con los productores de estas drogas, para que con precios más bajos puedan llegar a todas las personas que las necesitan”.
“Cada innovación en la respuesta al VIH representa una oportunidad para mejorar el camino hacia el control de la epidemia. Como en ocasiones anteriores, cada oportunidad es un llamado a trabajar en conjunto para que estas innovaciones contribuyan a achicar la brecha entre los países ricos y los países pobres, alcanzando a quienes más lo necesitan y donde la epidemia aún crece”, concluyó Cahn.